SANTIAGO.- Como "totalmente improcedente" y "una broma de mal gusto" consideró el canciller (s) Alberto Van Klaveren la petición de asilo político que pretenden realizar a las autoridades argentinas los dos ex lautaristas implicados en el asalto a la sucursal del Banco Security que concluyó con el crimen del cabo de Carabineros Luis Moyano.
"La petición de asilo por parte de ellos es totalmente improcedente, Chile es un Estado de derecho y esas personas están siendo acusadas de un delito común que en cualquier país del mundo constituye eso y realmente solicitar asilo en esas circunstancias parece una broma de mal gusto", dijo Van Klaveren.
El canciller (s) aseguró que el Gobierno está realizando todas las gestiones que están a su alcance para obtener la devolución de Marcelo Villarroel Sepúlveda y Freddy Fuentevilla Saa, quienes fueron detenidos el fin de semana pasado en la localidad argentina de San Martín de Los Andes, por porte de armas, amenazas e ingreso ilegal.
En ese sentido, recordó que el embajador chileno en el vecino país, Luis Maira, se encuentra en la provincia de Neuquén para hablar con las autoridades del gobierno provincial y del poder judicial.
Sin embargo, al igual que el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, Van Klaveren admitió que "la situación se ve compleja", porque los delitos que se les imputan a ambos sujetos son graves de acuerdo a la legislación argentina y, por lo tanto, hay procedimientos que deben cumplirse.
En ese sentido, la autoridad explicó que el Gobierno está "trabajando todos los escenarios: el que está en estos momentos desarrollándose en Neuquén, y también obviamente en caso que las autoridades judiciales soliciten la extradición". Agregó que se entregará a estas últimas "todo el apoyo que corresponda".
Van Klaveren evitó comparar este caso con el de Galvarino Apablaza, quien pese a estar inculpado en Chile por el crimen del ex senador Jaime Guzmán se encuentra en libertad en Argentina a la espera de que Corte Suprema de ese país se pronuncie sobre la apelación del Estado chileno al fallo que rechazó su solicitud de extradición.
El canciller (s) sólo se limitó a recalcar que el Ejecutivo realizará todas las gestiones para que Villarroel y Fuentevilla regresen a Chile "y que por lo menos estén a buen recaudo en una cárcel argentina".