SANTIAGO.- Durante los días 26 y 27 de abril se realizó en las ciudades de Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos) y Doha (Qatar) la Cumbre de Inversiones Árabe-Latinoamericana, organizada por el Gulf Latin Leaders Council, GLLC, y patrocinada por las familias reales de ambos países.
El objetivo de dicha cumbre fue crear conciencia en la región del Golfo Arábigo acerca de las oportunidades que se generan para la inversión en Sudamérica, especialmente en los sectores de agroindustria, inmobiliario, mercado de capitales, infraestructura, logística y energías tradicionales y renovables.
La delegación chilena, coordinada por el Consejo Empresarial Chileno Árabe (ChileArab) organismo que funciona bajo el alero de Sofofa- estuvo compuesta por Salvador Said del Grupo Said; Francisco Garcés Garrido del Banco de Chile; Ricardo Muhr de Antofagasta Minerals; Olaf Hantel de Cencosud; Eugenio Besa, del estudio de abogados Morales & Besa, y Jorge Daccarett, director de ChileArab, quienes fueron panelistas en los foros sectoriales.
Durante el viaje, los participantes tuvieron la oportunidad de reunirse con diversas entidades públicas y privadas, en especial fondos de inversión y fondos soberanos, donde se discutió el interés que existe en la región por participar de proyectos en sudamérica.
"Existe mucho desconocimiento mutuo entre ambas regiones, sin embargo, existen grandes similitudes", destaca Daccarett. Actualmente, las exportaciones a todo el Mundo Árabe no supera el 0,5% del total de las exportaciones chilenas, una cifra muy baja comparado con el 6,5% de Brasil o el 2,5% de Uruguay, en su mayoría del sector alimentos.
"El mundo árabe es hoy un importante proveedor de hidrocarburos (petróleo y gas), pero también de capital fresco para proyectos", agrega el ejecutivo. En este sentido, Dubai está potenciando su posicionamiento logístico, con inversiones en puertos como el de Callao en Perú; y Abu Dhabi en energías renovables con su ciudad ecológica Masdar.
En el caso de Qatar, con un ingreso per cápita de más de US$ 80.000, -el segundo más alto del mundo después de Luxemburgo-, este estado busca potenciar sus redes mundiales para colocar sus excedentes. Su línea aérea comenzará a volar el próximo mes a Sao Paulo y Buenos Aires.