SANTIAGO.- A fin de constatar las condiciones en que trabajan los deportistas durante las jornadas de alta temperatura y radiación solar, la directora del trabajo, María Cecilia Sánchez, concurrió este domingo al estadio San Carlos de Apoquindo, antes del encuentro entre Universidad Católica y Universidad de Concepción.
La visita de la autoridad junto a un grupo de fiscalizadores de la Dirección Metropolitana Oriente fue en respuesta a la reunión de esta semana entre la Ministra del Trabajo, Evelyn Matthei; el presidente del Sindicato de Futbolistas Profesionales, Carlos Soto; el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional, Sergio Jadue; el presidente del Colegio Médico, Enrique Paris, y el presidente de la Sociedad de Medicina Deportiva, Hugo Marambio.
En la cita, Soto planteó la preocupación del gremio futbolístico por las repercusiones en la salud de los jugadores debido a los partidos que se están jugando a horas de alta exposición a la radiación ultravioleta.
El presidente de la ANFP, Sergio Jadue, se comprometió a que en 2013 no se programarán partidos antes de las 15:30 horas.
Las materias fiscalizadas fueron la entrega y aplicación de protector solar a cada uno de los futbolistas, titulares y reservas, junto a otros trabajadores que deben permanecer expuestos al sol.
Además, se verificó la existencia de los elementos de primeros auxilios para la atención de emergencia ante algún accidente, tales como camillas, elementos inmovilizantes y botiquines con los implementos necesarios.
Los empleadores de los futbolistas, esto es, sus respectivos clubes, debieron también exhibir los productos hidratantes para paliar los efectos del calor.
En cuanto al recorrido María Cecilia Sánchez dijo que "estaba todo perfecto y (ambos clubes) tenían todo lo necesario para proteger la vida y salud de los trabajadores" agregando que "los árbitros estuvieron llanos a colaborar con los futbolistas profesionales, permitiendo de mutuo acuerdo de los club, una pausa de un minuto para que se puedan hidratar durante el partido".
Por su parte, el jugador de la Universidad Católica, Tomás Costa, afirmó que este tipo de fiscalizaciones son necesarias porque a mediodía es un horario muy difícil para jugar.
"Lo ideal es jugar después de las 17 o 18 horas, puesto que en este horario también influye la alimentación, ya que los jugadores pasamos más de cuatro horas sin comer, y sólo con las vitaminas que nos dan los médicos", explicó.