SANTIAGO.- El arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, expresó su "gratitud" hacia el Sumo Pontífice Benedicto XVI, quien el próximo 28 de febrero dejará su cargo en La Santa Sede.
"(Su renuncia) Es una acto de mucha generosidad y humildad de su parte. Quiero expresar mi cercanía al Papa y recoger el testimonio que nos da, de que somos servidores de personas y los cristianos tienen el derecho de que quienes somos sus pastores llevemos nuestro ministerio con salud", afirmó.
En una misa en la parroquia de Lourdes, destacó los casi ocho años del presidente de la Conferencia Episcopal, de quien "muchos pensaban, cuando fue elegido, de que iba a ser conservador".
"Ha sido un Papa sumamente abierto a la cultura contemporánea. Diría que ha sido uno de los Papas, junto a Pablo VI, que ha penetrado con mayor profundidad la cultura contemporánea", aseveró.
Ezzati además contó que un mes antes compartió con Benedicto XVI, quien le dijo que se sentía muy cansado y desgastado.
"Vi a un Papá cansado y muy sereno. Quería verlo en el encuentro de jóvenes de Río De Janeiro. Lo invité a Chile y me dijo que eso sólo dependía de Dios, porque estaba muy cansado y anciano", sostuvo.
En esa cuerda, explicó que el Santo Padre estaba agotado también "por su edad y por el peso que significa llevar a la iglesia adelante en todo momento".
"Estoy muy agradecido por el Papa. Es un gesto muy valiente. Estoy muy agradecido de su ministerio y de los ocho años que ha sido Pontíficie de la Iglesia Católica; no sólo nos ha regalado su gran sabiduría, sino también el testimonio de su fortaleza y santidad de vida", añadió.
E insistió: "Si hay alguien valiente e indicado el camino claro a la Iglesia ha sido el Papa Benedicto XVI".
Opciones de Errázuriz
Tras la homilía en la gruta de Lourdes, Ezzati confirmó que el cardenal Francisco Javier Errázuriz también tiene opciones de ser elegido como el sucesor de Benedicto XVI. "Él tiene derecho a participar del cónclave porque aún no ha cumplido los 80 años. Todos son candidatos", sostuvo.
Agregó que no sólo "los cardenales son candidatos. Puede haber un laico que también sea elegido. De hecho, el Código de Derecho Canónico prevé que si el elegido no es obispo, lo primero que hay que hacer es ordenarlo".
Francisco Javier Errázuriz Ossa (79) es uno de los 115 cardenales que podrá participar del cónclave donde la Iglesia elegirá al próximo máximo representante de la Iglesia, tras la renuncia de Ratzinger, que se concretará el 28 de febrero.