SANTIAGO.- El subprefecto Víctor Arriagada, jefe de la brigada de homicidios de la PDI, confirmó este mediodía que el proyectil que terminó con la vida del sindicalista Juan Pablo Jiménez, no estaba dirigida a él, ya que la investigación permitió determinar "que no hay vinculación directa entre la víctima y el victimario".
El jefe policial llegó hasta el Hospital Barros Luco donde se encuentra internado el menor de 16 años J.B.P.M, quien era seguido por los efectivos de la PDI cuando el domingo recibió ocho disparos tras un partido de fútbol en la población La Legua de San Joaquín.
Arriagada sostuvo que el joven será formalizado esta tarde y que después de dicha diligencia, se entregarán mayores detalles respecto del caso.
En tanto, fuentes vinculadas a la investigación señalaron que los policías allanaron dos casas esta mañana en la población La Legua en las que se encontró evidencia balística que conectarían al menor detenido con el homicidio del sindicalista.