BEIJING.- El gobierno chino mantuvo su postura inflexible en la controversia con el Comité Olímpico Internacional (COI) sobre la censura de Internet en el Centro de prensa olímpico.
Desde que el viernes se dieran alguna facilidades, no ha vuelto a habilitarse ningún portal de los bloqueados por las autoridades, tal como se constató hoy en un examen general.
La oferta de información de medios extranjeros y de organizaciones de derechos humanos mejoró entretanto, pero las páginas de adversarios del régimen exilados, disidentes, minorías y de defensores de derechos humanos chinos siguen sometidas a una estricta censura.
El presidente del Comité Olímpico Internacionl (COI), Jacques Rogge, había prometido un acceso sin trabas a Internet. Este fin de semana, Rogge dio marcha atrás y prometió sólo el "maximo acceso poosible".