SAN FRANCISCO.- Google admitió el viernes haber recogido "por error" datos sensibles de redes WiFi de todo el mundo y que los obtuvo inadvertidamente a través de los automóviles que utiliza para recopilar información para Google Maps y otros servicios.
A través de una publicación en su blog oficial, la empresa explicó que hace nueve días las autoridades encargadas de la protección de datos en Hamburgo, Alemania, pidieron auditar esta información que permite a los clientes encontrar restaurantes u obtener direcciones.
A partir de ese requerimiento, la empresa analizó sus propios registros y descubrieron un error. A pesar de que anteriormente habían afirmado que sólo recogían los nombres de las redes Wi-fi y las direcciones MAC, no registraban la información que se enviaba a través de esas conexiones, pero resulta que sí lo hicieron, sin querer, aseguran.
La empresa estadounidense señaló que ya se ha puesto en contacto con los reguladores en los países relevantes sobre cómo deshacerse rápidamente de estos datos y reconoció que "no ha estado a la altura" de la confianza depositada por la gente.
Por lo mismo, pedirá a asesores externos que revisen el software para reparar la falla, y borrar los datos que pudieron haber sido guardados. Además, “dadas las preocupaciones causadas, hemos decidido que es mejor que nuestros autos de Street View dejen de recoger la información de las redes Wi-fi completamente”.