BUENOS AIRES.- Ni el entrenador local Marcelo Bielsa, ni el de los visitantes, Nelson Acosta, quisieron adelantar alineaciones para el partido de Argentina y Chile por la eliminatoria mundialista sudamericana para "Japón-Corea 2002", que se disputará mañana miércoles a las 20.30 horas en el Estadio Monumental de Núñez.
Más de 50 mil entradas ya se encuentran vendidas para este importante encuentro y ambos equipos están definidos, aunque los directores técnicos hasta esta noche no han confirmado cómo entrarán a jugar en el campo de River Plate.
Lo que está confirmado será el árbitro del partido, el ecuatoriano Byron Moreno, quien es considerado de firme personalidad, muy estricto y del cual futbolistas chilenos guardan un mal recuerdo por una actuación que los perjudicó en la Copa Libertadores de América.
El cuadro chileno que entrenó hoy en la mañana en la cancha de Vélez Sarsfield, reconoció el campo de Núñez por la tarde y sus hombres se mostraron tranquilos, seguros -al menos- de hacer un buen partido.
Tanto los delanteros Zamorano y Salas, como el entrenador Acosta, señalaron que Argentina es un gran rival, pero que "ya va siendo hora que nos dediquemos a jugar de igual a igual, sin temores, ni sentirnos inferiores".
Los visitantes deben ingresar a la cancha, mañana a las 20.30 horas, con Tapia; Maldonado, Margas, Reyes y Contreras; Acuña, Ormazábal, Tello y Pizarro; Zamorano y Salas.
Los argentinos tienen un problema en el lesionado delantero Pablo Aimar, quien está desgarrado. Además, el técnico pretende jugar con un solo delantero en punta (Batistuta), dejando en la banca a Crespo.
Marcelo Bielsa, quien llamó a los hinchas locales a hacer presión sobre los chilenos y animar a todo dar a la selección, debería hacer ingresar a Bonano; Ayala, Pocchettino y Samuel; Simeone, Zanetti, Cristian González y Verón; Ortega, López y Batistuta.
