SANTIAGO.- El presidente de la Corte Suprema, Mario Garrido Montt, restó importancia este mediodía a la polémica que se produjo tras conocerse ayer y hoy el rechazo por parte del pleno de la Corte Suprema a algunas de las medidas del plan antidelincuencial del Gobierno.
"Yo no veo que haya habido descoordinación. Hay cierta disidencia en algunos aspectos, en opinión de la mayoría de los ministros de la Corte Suprema, en relación a algunos aspectos de eso, lo que no impide que el proyecto pueda tener algunos aspectos útiles para la justicia", sostuvo el presidente del Máximo Tribunal.
Según Garrido, las observaciones no obligan al Parlamento ni al Poder Ejecutivo a cambiar el proyecto, puesto que sólo se trata de una opinión de carácter consultivo.
El presidente de la Corte Suprema no quiso calificar las medidas del Gobierno, como ayer lo hicieron algunos magistrados. Sin embargo, respecto de las propuestas que hizo el Poder Judicial en el informe, texto que probablemente será enviado mañana al Congreso, Garrido comentó que tiene el anhelo de que se hagan muchos cambios en pro de una mejor administración del Poder Judicial, "entre ellas, el aumento de Cortes de Apelaciones en la zona metropolitana y otras cortes, que se aumenten los juzgados, etc."
El magistrado explicó que las observaciones de la Corte fueron hechas "siempre con el espíritu de colaborar y de mejorar las leyes que se dictan".
Entre ayer y hoy, el pleno de la Corte Suprema rechazó parte de las 20 medidas propuestas el 31 de octubre por el Presidente Ricardo Lagos, que se originó producto del fracaso de la investigación en los crímenes cometidos en Alto Hospicio, I Región.
En el documento, los magistrados se mostraron contrarios a la designación de jueces de turno las 24 horas del día y al nombramiento de jueces exclusivos en los delitos de mayor connotación social, como homicidios y violaciones, debido entre otras razones, a la proximidad de la entrada en vigencia de la Reforma Procesal Penal.
Asimismo, el informe redactado por el ministro de la Segunda Sala Penal, Alberto Chaigneau, se opone a aumentar dos nuevas salas de Corte de Apelaciones, una en San Miguel y la otra en Santiago. A cambio de este último punto, los ministros proponen la creación de dos nuevas cortes de Apelaciones: una en el sector oriente y otra en el poniente de la capital, así como también la creación de nuevas cortes en Valparaíso y Concepción.
