Sexualidad satisfactoria

 

“Hay más satisfacción donde hay menos pasión; el encuentro fortuito es más pasional, más rabioso, pero menos satisfactorio”, agrega Thomas.

 

El especialista remarca que ‘encontrarse’ va mucho más allá de dos cuerpos que se tocan, implica compenetrarse con el otro. Para que se dé una sexualidad satisfactoria, se debe dar una satisfacción emocional y por eso se puede afirmar que un encuentro con un trabajador sexual no es satisfactorio.

 

Los enemigos

 

sexoSabido es que el estrés es uno de los principales agentes que atenta contra la sexualidad satisfactoria, pero Christian Thomas también destaca las altas expectativas que se puede tener del encuentro y que se construyen a partir de imágenes culturales y del consumo de pornografía. “La pornografía distorsiona la realidad, engrandece el pene erecto, pero no lo emocional”, explica.

 

Suma la inmadurez emocional de la persona como uno de los factores que impedirán ese encuentro satisfactorio. La competitividad –querer ser más de lo que se es- también complota y ello se puede graficar en el hecho de que la mujer, en este modelo de igualdad de géneros, está copiando el modus masculino de tomar y desechar a través de encuentros casuales.

 

El sexólogo profundiza mencionando que las creencias culturales sobre el embarazo (una mujer embarazada es una madre santa que no se debe tocar) afectan la sexualidad.

 

Hay factores fisiológicos que también se hacen presente como la menopausia, la andropausia, las disfunciones sexuales, las infecciones vaginales y las patologías como incontinencia urinaria, cistitis de repetición y prolapsos.

 

 

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