Durante la jornada de este último lunes Nissan anunció que en poco tiempo detendrá por completo la producción de su fábrica en San Petersburgo, mientras tanto, la firma japonesa aseguró que mantendrá en pausa sus exportaciones a Rusia, sumándose a las empresas que ya han cortado lazos con este país.
Para brindar apoyo a la crisis humanitaria provocada por los ataques militares del ejército ruso al territorio ucraniano, Nissan ha señalado en un comunicado oficial que está creando un fondo de 2.5 millones de euros para destinarlos a organizaciones como la Cruz Roja.
La firma japonesa también destinará 1.5 millones de euros para ayudar a las familias de sus empleados en el país, con el fin de que tengan una oportunidad de estabilidad económica a pesar de la crisis que están viviendo.
En específico, la compañía nipona pretende destinar estos montos para ayudar en casos particulares donde sea necesario cubrir gastos de reubicación y manutención, así como los gastos médicos de las familias desplazadas, pero particularmente brindar especial asistencia a los niños en estas condiciones.
Nissan ha convocado a través de una invitación a empleados y socios de la marca que deseen unirse a la causa a nivel global, a contribuir al Nissan Cares, ya sea a través de aportaciones económicas o en especie, donando alimentos y ropa.
“Todos nos hemos sentido conmovidos por el sufrimiento de tantas personas y familias, incluidos los miembros de nuestra propia familia. Hemos creado el fondo Nissan Cares para respaldar a nuestros empleados y apoyar los esfuerzos internacionales que trabajan día y noche para responder a esta inconmensurable tragedia humana”, declaró Makoto Uchida, CEO de Nissan.
