EMOLTV

Sobreviviente relata cómo fue la tragedia a 25 años del atentado a embajada israelí en Argentina

El ataque del 17 de marzo de 1992 dejó 29 fallecidos y a la fecha la justicia transandina todavía no cuenta con ningún culpable del caso. En diálogo con Emol, Lea Kovensky recuerda lo ocurrido en Buenos Aires.

17 de Marzo de 2017 | 08:15 | Por Cecilia Vial, Emol
SANTIAGO.- "Yo no sentí nada, pensé que había recibido una descarga eléctrica, porque justo había entrado un llamado y fue la explosión, salí volando y pensé que me estaba pasando a mí, no algo más grande". Con estas palabras, Lea Kovensky recuerda cómo vivió el atentado a la embajada de Israel en Buenos Aires, ocurrido en 1992.

Este viernes se cumplen 25 años del atentado, un hecho que lamentablemente fue el primero pero no el único de este tipo durante la década de los 90 en Argentina. En conversación con Emol, Kovensky, quien trabajaba en ese tiempo como secretaria del agregado militar de la embajada israelí en la capital trasandina, relató cómo fue sobrevivir al atentado, a pesar que su destino debería haber sido otro ya que "mi oficina estaba justo en la esquina de Arroyo y Suipacha", donde se encuentra el edificio atacado.

A las 14:00 horas de ese día, la mencionada esquina se transformó de un momento a otro en un caos total. Una columna de humo negro emergía de la embajada de Israel señalando las consecuencias del atentado organizado, según las acusaciones judiciales, por miembros de la agrupación extremista Hezbollah. Ese 17 de marzo de 1992, la bomba mató a 29 personas y destruyó la Embajada de Israel, la Parroquia Madre Admirable, un hogar de ancianos, una escuela y casas vecinas.

Relatos de una sobreviviente

"En el momento del atentado, justo había salido de mi oficina y estaba charlando con Mirta -la telefonista- y Enrique su marido- en el hall de entrada. Mientras me tomaba un café y me fumaba un cigarrillo con ellos, fue cuando me encontró el atentado", contó Kovensky. "Yo no sentí nada, pensé que había recibido una descarga eléctrica, porque justo había entrado un llamado y fue la explosión, salí volando y pensé que me estaba pasando a mí, no algo más grande", agregó la argentina.

Esta ex funcionaria de la embajada israelí recuerda entre ciertos vacíos mentales, cómo reaccionó tras el estallido. "Cuando pude incorporarme y se disipó la nube negra que cubría todo, empecé a darme cuenta de lo que había sucedido. Vi que estaba una compañera que había sobrevivido, nos tomamos de las manos y buscamos una salida, después vimos que estaban evacuando a la gente por una ventana".

"Cuando salimos, un hombre que había ofrecido ayuda nos llevó a nosotros y a otros heridos en su camioneta, al Hospital Fernández, donde estaban concentrando a toda la gente afectada por el atentado", añadió.

¿Se hizo justicia?

Luego de 25 años, familiares y sobrevivientes acusan que el Poder Judicial argentino tiene un saldo pendiente con ellos, ya que todavía no se ha podido dar con los culpables. "Esto solamente lo puede resolver la justicia, el investigar, encontrar a los culpables, en hacer que las caras que llevaron este acto terrorista estén donde tienen que estar y que sean condenados socialmente, esa parte nos falta a todos. Nos falta a los sobrevivientes, a los familiares y a los argentinos", enfatizó Kovensky.

La investigación judicial del ataque no presenta novedades desde hace dos años, cuando la Corte Suprema de Justicia decidió reactivar la búsqueda de los responsables. Según el máximo tribunal, los culpables fueron Abbas Musawi, secretario de la organización terrorista Hezbollah, e Imad Mughniyah, director de la seguridad central y exterior de la agrupación y vinculado por Estados Unidos a Al Qaeda.

El 15 de octubre de 2015 los jueces argentinos ordenaron la captura de Hussein Mohamad Ibrahim Suleiman, agente de Hezbollah y miembro de la agrupación Yihad Islámica, y de José Salman El Reda, un colombiano prófugo a quien el fallecido fiscal federal Alberto Nisman había seguido por su presunta participación en el atentado terrorista cometido en julio de 1994 contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en el que murieron 85 personas.

Este año la embajada de Israel en Argentina inició una campaña de concientización con el lema "Paz sin terror" -en la que participaron figuras públicas del país, entre ellos la vicepresidenta, Gabriela Michetti, y el jefe de Gabinete, Marcos Peña- para recordar que la bomba asesinó a argentinos y ciudadanos de distintos países y religiones, y que por lo tanto "el terrorismo no discrimina".
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?