SANTIAGO.- "¿Y si las chilenas hablan?" Así comenzó una carta escrita por el Premio Nacional de Periodismo 2015, Abraham Santibáñez, quien —a raíz de la gran cantidad de denuncias de acoso sexual por figuras públicas en el mundo y principalmente en EE.UU.— señaló que "me preocupa pensar que tal vez estamos a punto de vivir lo mismo en nuestro país".
Así, el también ex presidente del Colegio de Periodistas expuso una carta al director publicada por El Mercurio el caso del empresario Emeterio Ureta, quien declaró públicamente haber acosado a mujeres, e indicó que "más de una vez, durante mi ejercicio profesional supe de entrevistados -generalmente políticos, pero no únicamente- que se insinuaban con más o menos sutiliza a las periodistas (en rigor, hablar de sutileza es un eufemismo)".
Nunca se hizo nada, afirmó, "porque lo fundamental es la voluntad de la víctima de exponer una situación de este tipo".
"Estoy seguro, después de lo que se ha sabido, desde Hollywood a Westminster (Reino Unido), que las víctimas chilenas también podrían estar dispuestas a revelar estas condenables situaciones que han sufrido. La vergüenza no es de ellas, por cierto, sino de quiénes mostraron su total falta de respeto", manifestó Santibáñez.
En este sentido, continuó el experto en ética periodística, "espero, independientemente de que se haga luz sobre estas repudiables conductas, que sus protagonistas estén sufriendo, por lo menos, lo que habitualmente se denomina 'una tensa espera'".
"Tal vez podríamos ser testigos de asombrosas sorpresas", concluyó el profesional de las comunicaciones.