Dada su longevidad, Collot a veces decía que Dios se había olvidado de ella.
AFP
PARÍS.- Élisabeth Collot, que con 113 años era desde comienzos de julio la persona viva con más edad en Francia, falleció el pasado domingo en su casa de Echirolles, en las proximidades de Grenoble (al este), reveló hoy en su página internet "Le Dauphiné Libéré".
Su hijo Michel (82 años), que vivía con ella, explicó al diario que después de darle de comer (a las 13.15 hrs) durmió una siesta y fue entonces cuando falleció Élisabeth Collot, quien era la mujer más longeva de los franceses, desde la muerte el 1 de julio de otra mujer en la Guayana, Eudoxie Baboul, con 114 años.
Collot, quien nació en Haute-Marne 21 de junio de 1903, vivía en Echirolles desde 1925, poco después de casarse, y desde entonces había tenido seis hijos, once nietos, 24 bisnietos y cinco tataranietos.
La persona que llegó a una edad más avanzada en Francia fue Jeanne Calment, que murió en 1997 con 122 años, 5 meses y 14 días.
Según la hija de Collot, Marie-Thérèse, la anciana nunca había fumado, y bebía poco alcohol, salvo “un poco de rosé” de vez en cuando.
Además, le encantaba cantar canciones antiguas y dada su longevidad, a veces decía que “el buen Dios” se había olvidado de ella.
