Mago David Blaine fue rescatado de la pecera para no "ahogarse en vida"
Aunque mantuvo sumergido su cuerpo en agua siete días no logró superar la marca mundial de contener la respiración, establecida en 8 minutos y 58 segundos.
NUEVA YORK.- El mago estadounidense David Blaine, especialista en retos de resistencia, fue rescatado este lunes por la noche en Nueva York de la pecera en la que ha pasado una semana cuando parecía a punto de ahogarse al tratar de batir el record mundial de aguantar la respiración.
Blaine, de 33 años, completó parte de los objetivos que se había marcado en "Drowned Alive", "ahogado en vida": aunque mantuvo sumergido su cuerpo en agua siete días no logró superar la marca mundial de contener la respiración, establecida en 8 minutos y 58 segundos.
El mago de origen puertorriqueño quería además culminar el reto desembarazándose de los 50 kilos de cadenas atadas a sus extremidades.
Blaine tuvo que ser sacado de la pecera cuando llevaba siete minutos y ocho segundos sin respirar y se había desembarazado de las esposas que le ataban las muñecas pero no de las que le sujetaban los tobillos.
Visiblemente exhausto por el esfuerzo, con las manos casi descompuestas por el agua, Blaine tuvo palabras amables para el público antes de ser tratado por los médicos.
"Estoy tan agradecido por el apoyo de Nueva York. Ha sido una semana muy difícil pero ustedes la hicieron pasar rápido con su espíritu y energía", sostuvo.
La iniciativa de Blaine, hasta ahora conocido por haber ayunado 44 días en Londres en 2003 en una caja transparente suspendida a 10 metros del suelo sobre el río Támesis, ha gozado del apoyo mediático de una de las grandes cadenas de televisión estadounidenses, ABC, que retransmitió las dos últimas horas del reto en directo, y un gran equipo de apoyo fuera de la pecera.
Al rescate.
Sumergido el 1 de mayo en agua a la temperatura del cuerpo, filtrada y renovada, Blaine, de torso desnudo, pantalones, botines y guantes negros, sobrevivió gracias al oxígeno que le llegaba por un tubo y a la comida líquida que le suministraban por otro, eliminando los residuos mediante un catéter.
Algo pudo dormir, aunque en breves periodos para no perder el tubo que le permitía respirar.
La pecera en la que Blaine estuvo suspendido estaba en la plaza del Lincoln Center, rodeada de la Opera Metropolitana, el Ballet Municipal y la sede de la Orquesta Filarmónica, creando una escenografía casi lunar.
Blaine contó además con el apoyo de un público más positivo que el londinense, que acompañó sus 44 días sin comer paseándole hamburguesas frente a su jaula de cristal, tirándole huevos y tratando de perturbar su sueño con música.
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