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Santiago: Miércoles 17 de diciembre del 2025 | Actualizado 07:55
BUENOS AIRES.- El ex comandante en jefe del Ejército argentino Cristino Nicolaides fue condenado hoy a 25 años de prisión por la desaparición de cinco militantes de la organización armada de izquierda peronista "Montoneros" en 1980, durante la última dictadura militar (1976-1983).
A la misma pena fue condenado el coronel Jorge Arias Luis Duval, ex jefe del Batallón de Inteligencia 601, en tanto que otros cuatro oficiales, un policía y un agente civil, todos ellos integrantes de la cúpula de esa dependencia militar, recibieron también condenas de entre 20 y 25 años de prisión.
Los acusados fueron encontrados culpables de integrar una "asociación ilícita" para cometer los delitos de "tormentos, privación ilegal de la libertad agravada y reducción a la servidumbre" de un grupo de militantes de "Montoneros" que ingresaron al país clandestinamente en 1980 para llevar adelante una "contraofensiva" ante el régimen castrense y fueron capturados.
El juez federal Ariel Lijo expresó en su sentencia que los acusados actuaron en "el marco del poder estatal" para "ejercer y abusar de sus funciones y llevar adelante el plan" de aniquilar a la guerrilla, según informó la agencia local DyN.
El hoy disuelto Batallón de Inteligencia 601 era un "engranaje de relevancia" y "núcleo central" para perpetrar delitos "aberrantes" con la "impunidad como eje preponderante" entre 1976 y 1983, según la sentencia del juez.
Nicolaides, quien integró la última junta militar de la dictadura luego de la Guerra de Malvinas, era en la época de los hechos juzgados comandante del Tercer Cuerpo de Ejército, con sede en Córdoba.
Las víctimas por las que se condenó a los acusados son Julio César Genoud, Verónica María Cabilla, Angel Carvajal, Lía María Guangiroli y Ricardo Marcos Zucker -hijo del actor fallecido Marcos Zucker-, que siguen desaparecidas, y Silvia Tolchinsky, quien fue secuestrada en 1980 cuando ingresó al país por Mendoza, fue mantenida en cautiverio y luego vigilada durante dos años, hasta que logró escapar a Israel con un pasaporte falso.
