El secuestro extorsivo del exalcalde de Macul Gonzalo Montoya evidenció una situación que los investigadores comenzaron a observar hace ya un tiempo: luego del encarcelamiento de los jefes o líderes de la delincuencia organizada en el país, principalmente, de aquellos ligados a células o facciones del Tren de Aragua -de origen venezolano, pero de carácter transnacional-, vino el "ascenso" de los "soldados" o miembros más jóvenes de estas agrupaciones. Expertos en seguridad pública empiezan a percibir el cambio de escenario criminal. "Creo que es una reorganización. Esto, en general, ocurre en las organizaciones criminales cuando algunos de sus miembros son detenidos", advierte Francisco Alcorta, investigador de Libertad y Desarrollo.