SANTIAGO.- "Nunca había desayunado con tantos hombres juntos" dijo entre risas Michelle Bachelet al inicio de su discurso frente a un centenar de hombres, representantes de diversos ámbitos como la cultura, la política y las ciencias.
La cita, realizada en el hotel Cap Ducal en la comuna de Providencia, fue moderada por el fotógrafo Luis Weinstein, y contó con la presencia de rostros como: Julio Jung, Nissim Sharin, Cristián Galaz, Willy Semler, Tucapel Jiménez, el empresario Ricardo Paz y el abogado Nelson Caucoto, entre otros.
Antes de las palabras de agradecimiento de la abanderada, algunos de los invitados pronunciaron discursos de apoyo a su candidatura.
Uno de los hombres que habló en el encuetro fue el doctor Carlos Flores, director del hospital de niños Roberto del Río, y ex compañero de trabajo de Bachelet, quien aseguró que espera que el próximo domingo "Michelle" empiece a hacer grandes labores como médico desde la presidencia.
El ex juez que llevó el caso "Caravana de la Muerte", Juan Guzmán también fue uno de los 100 hombres que acompañó a Bachelet de cara a las elecciones del próximo 15 de enero.
"(Mi presencia én el desayuno) Es un respaldo y un llamado a la gente indecisa a votar por Michelle que es una garantía de democracia. No votar por ella sería votar por 17 años de tiranía. Eso es muy útil que lo sepan los jóvenes".
El Premio Nacional de Literatura, Jorge Edwards, junto con entregar su respaldo absoluto a la candidata, aprovechó de pedirle que en su eventual gestión en La Moneda, se preocupe de impulsar el desarrollo cultural de nuestro país.
"Chile ha tenido un desarrollo extraordinario, pero también tiene carencias. La cultura es parte de la educación y nosotros tenemos mucha carencia en cultura", dijo Edwards.
También intervino en el desayuno el Premio Nacional de Ciencias, Humberto Maturana, quien resaltó la labor de la democracia y planteó la importancia de que el próximo gobierno de Bachelet cuente con políticas integrales de desarrollo del país.
Tras escuchar los discursos de apoyo a su candidatura, Bachelet lanzó algunas bromas a sus compañeros de mesa, como por ejemplo comentar que era su primer desayuno con tantos hombres y aseguró que pretende ser una líder que aúne posturas con la búsqueda de consensos y no un liderazgo autoritario ya que según ella este último es el más fácil que existe pues sólo requiere alguien a quien mandar.
