SANTIAGO.- Tras terminada la misa de la ceremonia fúnebre del general Alejandro Bernales y su comitiva trágicamente fallecidos en Panamá, familiares de las víctimas proclamaron emotivos discursos para despedir a sus seres queridos.
A nombre de la familia Bernales Bianchini tomó la palabra el hijo mayor, Alejandro, quien además de pronunciar conmovedoras palabras sobre sus padres, agradecimientos y condolencias a las familias de todos los fallecidos en la tragedia, hacer un recuento de las obras que realizó tanto su padre como de su madre, exigió a la Presidenta Bachelet que se realicen todos los esfuerzos para esclarecer las causas del accidente que les costó la vida.
“Quiero aprovechar esta instancia también, como lo habría hecho mi padre, para solicitar y exigir a los generales y a la Presidencia que aporten todas las instancias necesarias para esclarecer y darnos la tranquilidad de tener la verdad sobre los hechos por los cuales se suscitaron estos trágicos acontecimientos”, señaló.
Sobre sus padres, dijo, entre otras cosas, que “se amaban locamente” y no podían estar lejos. "Que si hay un cielo ellos están allá ahora viviendo". "Como padres fueron los mejores y como abuelos también".
A su madre,Teresa Bianchini la catalogó como “un ángel, siempre pensando en los demás”. Y a su padre, el fallecido general, como “un gran estratega y un “gran líder”. Que cuando mataban a un carabinero era como si muriera un hijo o un hermano y que hizo de Carabineros “el mejor producto de exportación de Chile”.
Por último, agradeció a todos los que trabajaron con sus padres en todos estos años, a los empresarios que hicieron “que muchos de los proyectos impulsados por nuestros padres se convirtieran en realidad”, a la prensa, a todas las personas “que han mostrado su afecto y cariño por nuestro papá” y a la comunidad, “que lo han convertido en el general del pueblo. Personalmente me parece increíble ver estas dos palabras tan unidas en este país”.
A estas palabras se sumó las de Victoria Bianchini, hermana de Teresa, quien agradeció a Dios por “haberlos puesto en nuestras vidas, gracias Señor por la dedicación que pusieron en cada cosa que realizaron”. Agregó que la pareja “No están muertos, sólo cambiaron de residencia. Ustedes vivirán mientras se les recuerde. Sólo mueren los que son olvidados”.
Los otros familiares
A nombre del capitán Fuenzalida, tomó la palabra su hermano Luis, oficial de la Fach, quien se refirió a su fallecido familiar como su “amigo”, un buen hijo, esposo y padre, recordándolo en su infancia como un "niño normal, inquieto, observador y ávido de descubrir cosas nuevas" y de mayor como "arriesgado, sin temor y decidido". "Como carabinero siempre tuvo una meta: servir y ser leal en el cumplimiento de tus labores". Por último, le agradeció por “llenar mi vida de alegría” y que señaló que se preocupará de su esposa viuda, quien lloraba amargamente mientras escuchaba estas palabras y de su hija pequeña.
En tanto, en nombre de la familia del Comandante Orozco, la encargada de hablar fue su hermana Elena, quien lo despidió en la misma escuela que su familia “orgullosa” lo vieron desfilar. Se refirió a él como "Padre, hermano, amigo, carabinero, deportista, roles que cumpliste intensamente. Apasionado por Carmen Gloria (esposa) y tus hijos, padre abnegado, hijo ejemplar, hermano, amigo, eras el apoyo siempre presente". Para terminar, expresó que el recuerdo de su risa "ayudará a nuestro consuelo".