Restos del accidente de Bernales y su comitiva.
Juan Eduado López, El MercurioPANAMÁ.- Tres días antes de que se venza el plazo fijado por la Ley de Transparencia de Panamá, ayer el director del Servicio Aéreo Nacional de ese país (SAN), Rigoberto Gordón, rechazó dos pedidos de acceso a la información –interpuestos por el matutino La Prensa, el pasado 28 de agosto- para que se haga pública la documentación del helicóptero SAN-100 que se estrelló con Bernales y su comitiva.
Según el diario, la negativa a la petición, implica que no se publicará la bitácora del aeronave; ni el registro de las anomalías que sufrió el helicóptero desde el 1 de enero de 2007 hasta el día del accidente (29 de mato de 2008); y tampoco las notas administrativas del Servicio Aéreo, vinculadas al SAN-100.
“El gobierno ha tenido la oportunidad de ser transparente, ante la ciudadanía, sobre toda la investigación de la tragedia, y se niega a que todos conozcamos la realidad de los sucedido”, dijo el presidente de la corporación La Prensa de Panamá, Fernando Berguido.
Según el matutino, el gobierno no entregó la información por ser considerada “confidencial”, además de que los datos son parte de un proceso judicial y por ende, sólo las partes involucradas tienen acceso a estos. “Han muerto oficiales panameños en una aeronave del Estado y, por eso, todos somos parte de este proceso”, recalcó Berguido.
Helicóptero del SAN aterriza de emergencia
El miércoles pasado, la aeronave Bell 407 –matrícula SAN-110- del Servicio Aéreo panameño debió efectuar un aterrizaje de emergencia en un potrero del distrito de Chepo, luego de que una luz de alarma se encendiera en el panel del helicóptero.
Tras el hecho, el piloto solicitó ayuda a un automóvil particular que pasaba por la zona, el cual llevó a una menor de edad y a un paramédico del SAN, al hospital de Chepo.
Según La Prensa, el 1 de septiembre pasado, el director de la Autoridad Aeronáutica Civil, Eustacio Fábrega, reconoció que en la bitácora de esa aeronave se reportaron varios incidentes que ya fueron reparados. Sin embargo, no respaldó sus palabras con documentos, planteó el matutino.