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Santiago: Domingo 05 de mayo del 2024 | Actualizado 17:12
SANTIAGO.- Una experiencia pionera a nivel mundial está impulsando el Metro de Santiago, que hoy alcanzó un acuerdo de cooperación técnica con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que le permitirá vender los denominados "bonos de carbono".
Este mecanismo, que obliga a que los países desarrollados reduzcan sus Gases Efecto Invernadero (GEI) producido por emisiones de dióxido de carbono, hará que Chile se convierta en el tercer país (después de India y Colombia), en generar bonos de carbono con un proyecto de transporte público y situaría a Metro de Santiago en el segundo metro del mundo en generar estos bonos.
La relevancia de la venta de bonos de carbonos está dada porque los países adscritos al protocolo de Kioto tienen metas de reducción de emisiones contaminantes y para conseguirlo, pueden financiar proyectos de captura o reducción de estos gases en otras naciones, principalmente en vías de desarrollo, generando así beneficios ambientales y económicos para la nación que los recibe.
En el caso del Metro, la empresa está impulsando la generación de bonos de carbono a partir de la eficiencia energética que ha generado en su operación gracias a distintas acciones que ha implementado en el último tiempo así como otras a desarrollar, entre las que destaca el nuevo proyecto de conducción CBTC.
Este sistema consiste en reemplazar el sistema de conducción de los trenes actuales por un sistema de pilotaje de trenes basado en las comunicaciones.
Para concretar este proyecto, el Presidente del Directorio, Clemente Pérez, y el representante en Chile del BID lograron un acuerdo de cooperación técnica, mediante el cual se solicitarán los bonos de carbono para CBTC.
La iniciativa mejorará la exactitud y fiabilidad con que se localizan los trenes, con lo cual se conocerá su posición exacta en todo momento. Esto permitirá evitar detenciones innecesarias y reducir la distancia entre trenes, mejorando la eficiencia energética.
Se espera que CBTC disminuya el consumo energético en cerca de 30 GWh/año, lo que implica dejar de emitir 15.300 toneladas de CO2, generando ingresos anuales por US$229.000.
Además de este proyecto, destacan otros como la reutilización de energía generada durante el frenado de trenes, los trenes express y la implementación de iluminación inteligente.
