EMOLTV

Destruyen el "y vivieron felices para siempre" con proyecto "princesas caídas"

La fotógrada Dina Goldstein muestra a Blancanieves, Pocahontas y Cenicienta, entre otras, enfrentando enfermedades, adicciones o matrimonios infelices.

23 de Agosto de 2013 | 14:52 | Emol
imagen
Dina Goldstein
La escena ocurre en el living de una casa. Él está sentado con los pies sobre una banca, tomando cerveza y mirando la televisión. Ella de pie y descalza, con dos bebés en sus brazos, además de una niña que tira de su vestido. Otro niño juega un poco más atrás, mientras el perro se come las papas fritas que cayeron al suelo.

La imagen representa el diario vivir de una familia, donde el padre está ausente -a pesar de estar presente- y una madre que se lleva todo el peso del trabajo doméstico. Sin embargo, lo insólito de ésta es que los protagonistas son Blancanieves y el príncipe Encantador, quien con su romántico beso despertó a su amada del hechizo de la “muerte dormida” causado por la manzana envenenada.

¿Y qué pasó con el "y vivieron felices para siempre"?, de seguro te preguntarás. En este caso, la famosa frase que suele cerrar los cuentos de hadas que tanto cautivan a las niñas, fue reemplazada por la cruda realidad y pasó a formar parte del proyecto "Fallen princesses" o "Princesas caídas" de la fotógrafa Dina Goldstein.

"El proyecto fue inspirado por mi observación de niñas de tres años de edad, que estaban desarrollando un interés por los cuentos de hadas de Disney (…) Éstos casi siempre tienen un comienzo triste, una villana femenina dominante y el final es predeciblemente uno feliz. El príncipe en general salva el día y convierte en una princesa a la joven víctima", explica la fotógrafa en su sitio web.

Entonces, Goldstein comenzó a imaginarse a las perfectas princesas enfrentando asuntos reales que pueden afectar a cualquier mujer, como enfermedades, adicciones y problemas de autoestima. "Con recursos limitados comencé a montar mis series, incorporando muchos detalles importantes en cada imagen", relata.

El resultado fueron escenas bastante alejadas de lo que se puede ver en las películas de Disney y algunas muy impactantes, como la de una Rapunzel que padece cáncer. En la fotografía, la princesa de larga y dorada cabellera aparece en la habitación de un hospital, en tratamiento de quimioterapia y totalmente calva. A su lado descansa una peluca fabricada con su propio pelo.

En otra imagen, Cenicienta está sentada en un bar de mala muerte en un siniestro barrio de Vancouver (Dina Goldstein vive en Canadá). Con su mano derecha sostiene un vaso de alcohol, mientras a unos metros de ella un grupo de hombres la observan.

Caperucita Roja también está presente en el proyecto, pero no precisamente como se presenta en los cuentos infantiles. En la fotografía de Goldstein, la niña está obesa y camina por el bosque rumbo a la casa de su abuela, cargando una canasta repleta de comida chatarra y bebiendo un gran vaso de bebida.

"Soy una realista feroz, así que quería que las princesas estuvieran en situaciones de la vida real con sus propios problemas", señaló la fotógrafa a Cargoh.com, un sitio orientado al arte independiente, el diseño y la cultura. Allí, Goldstein también relató que se demoró dos años en concretar su proyecto y que la idea original surgió cuando a su madre le diagnosticaron cáncer de mama.

Polémicas imágenes

Una vez que "Princesas caídas" estuvo listo, la fotógrafa publicó las imágenes en internet para recibir opiniones sobre su iniciativa. "Comencé a recibir muchos correos y peticiones de entrevistas. Las princesas se abrieron camino alrededor del mundo y se hicieron virales", contó.

Incluso se crearon grupos de discusión, algunos de los cuales criticaban a Goldstein por estereotipar a la obesa Caperucita Roja. "Jasmine fue otra de las piezas discutidas. Algunos me acusaron de mostrar a la princesa como una terrorista (la hija del sultán aparece en el medio de una batalla con un fusil de guerra). Mi intención era mostrar su fuerza y coraje", dijo.

"En general estoy interesada en escuchar los que las personas tienen que decir, pero no me tomo nada personalmente" agregó.

Éste no es el único proyecto de Dina Goldstein que ha dado que hablar. "In the dollhouse" o "En la casa de muñecas", la fotógrafa expone el lado oscuro del matrimonio entre Barbie y Ken.

"B es una súper muñeca, la muñeca más exitosa en todo el mundo. K, su pareja, está batallando contra su sexualidad y se encuentra en un matrimonio sin amor. Lucha con su posición en la casa y enfrenta una falta de autenticidad", cuenta Goldstein.

Así, en la serie la pareja aparece en situaciones de la vida cotidiana que reflejan su imperfecta vida. En una de ellas, por ejemplo, B y K están en el baño, ella lavándose los dientes y él arreglando su cabello con un secador de pelo. En otra, B espera a su marido para que compartan una romántica cena, pero él la deja plantada y ella ahoga su pena en el alcohol.

Las últimas dos imágenes de "En la casa de muñecas" son quizás las más impactantes. En una, B está sentada sobre la cama matrimonial, con tijeras en sus manos y cubierta por los restos de su platinada cabellera que acaba de cortar. Su rostro refleja mucha tristeza y está vestida con un traje de hombre. En la otra, la popular muñeca aparece decapitada como resultado de su fracaso matrimonial.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?