En medio de estrictísimas medidas de seguridad, la pareja de recién casados podrá ser saludada por la ciudadanía.

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MADRID.- "Es una ocasión única. ¡Sólo tenemos un príncipe y nos ha costado muchos años encontrarle una novia!", opinaba entre risas Asunción Gómez, funcionaria jubilada, mientras recorría ayer el trayecto entre la plaza de Cibeles y la estación de Atocha, por donde pasará el cortejo real el sábado.

Provistos de máquinas fotográficas y cámaras de video, miles de personas han invadido las calles de Madrid para inmortalizar la ciudad vestida de blanco, rosa, plata y ocre con motivo de la boda. A continuación los lugares escogidos para el recorrido:

Palacio de El Pardo: residencia oficial de Francisco Franco, este palacio acogerá hoy la primera celebración de la boda, la cena de gala que la familia real ofrecerá a sus 400 invitados más ilustres. Ubicado al norte de Madrid, con la restauración de la democracia el rey Juan Carlos lo convirtió en un museo abierto al público. Desde principios de los ochenta se utiliza como residencia de los jefes de Estado extranjeros en visita oficial. La primera fotografía del príncipe y Letizia con los reyes fue captada en este palacio, tras la petición de mano en noviembre del 2003.

Catedral de la Almudena: 110 años después de que se iniciara su construcción, esta boda se considera el verdadero estreno de este templo, consagrado en 1993 por el Papa. De estilo neogótico y dedicado a la patrona de Madrid, la Virgen de la Almudena, tiene 13 capillas y tres altares. En su interior se acogerá a los 1.400 invitados. A la derecha del presbiterio se ubicará la familia real y, al lado opuesto, los parientes de la novia. Así, en la nave central, de 82 metros de largo, se dispondrá a todo el resto de los asistentes, entre ellos a los representantes de casas reales y gobiernos.

Basílica de Atocha: Una vez que termine el enlace, la pareja, ya marido y mujer, se dirigirá a la Basílica de la Virgen de Atocha para depositar el ramo de la novia. De esta forma, buscan seguir una tradición que mantiene íntimamente ligada a la familia real con esta virgen madrileña. De hecho, en su día, los reyes Juan Carlos y Sofía le presentaron a la virgen sus hijos. Pero, además, en esta ocasión la visita adquiere mayor simbolismo, pues se ubica a muy pocos metros de la Estación de Atocha, principal escenario de los atentados del 11 de marzo.

Palacio Real: Luego de visitar la Basílica de Atocha, la pareja volverá al Palacio Real, donde los estarán esperando sus invitados, listos para iniciar un almuerzo que se ofrecerá en el Patio del Príncipe (que ha sido cubierto por una carpa única en el mundo). Junto a las mesas ya está colgada una selección de 55 valiosos tapices, muchos de ellos jamás expuestos. Se espera que antes del almuerzo, saluden a la multitud agolpada en la Plaza de Oriente. Para eso, saldrán al balcón central, el mismo desde el que Franco solía drigirse al pueblo.