Ford abandonó las formas que acompañaron durante años al tradicional Fiesta y se la jugó por un diseño totalmente distinto y moderno. Eso ha quedado en claro con la exhibición del conceptual Verve, vehículo que adelanta las líneas de la quinta generación del Fiesta, que verá la luz el año 2008 y tendrá semejanzas mecánicas con el Mazda2. El modelo será el primero de tres vehículos conceptuales que se lanzarán en regiones clave para la empresa, como Europa, Asia y América del Norte.