Entrevista Andrés Rodriguez >>

Verónica González: "El Municipal, un activo cultural del país".

A inicios del año 2002, la administración del Teatro Municipal prometió un ambicioso plan para superar una crisis financiera que se venía arrastrando por años.

Para sanear este déficit, de casi 3 mil millones de pesos, que se venía acumulado desde 1999 fue nombrada Verónica González como directora de Gestión y Proyectos.

Se me solicitó que hiciera un análisis del posible financiamiento del teatro como un proyecto viable al largo plazo. Había que reestructurar un proyecto que fuera atractivo para el sector privado y para el Gobierno”, explica González.

¿De qué manera se financia actualmente el Teatro Municipal?
"Primero hay que entender que en el mundo los teatros que tienen cuerpos estables (ballet, orquesta y coro) no se financian solamente con la venta de sus entradas; generalmente sus presupuestos vienen financiados en un 60 u 80% por el Estado".

"En el caso de Chile, el Teatro Municipal se financia en un 40% con aportes municipales, un 30% es costeado por la venta de entradas y espectáculos extraordinarios, que no son realizados por los artistas permanentes del teatro, y otro 30% tiene que venir de aportes privados, ya sea a través de donaciones, patrocinios u otro tipo de actividades".

"El Ministerio de Educación aporta un monto aproximado de 1.275 millones de pesos a través de la difusión que realiza en provincia; en tanto la Municipalidad de Santiago, entrega 2.365 millones de pesos más".

Verónica González es enfática al asegurar que es justo decir que el teatro le pertenece al país no a una municipalidad determinada y por ello –explica- el financiamiento no puede recaer sólo en un municipio.

"Actualmente hay un acuerdo de la municipalidad de Santiago con los alcaldes de Vitacura y Las Condes para que entreguen su aporte, lo que en total suma más o menos $600 millones anuales".

"Para ello, cedieron los espacios de las pasarelas en Kennedy para que todos los ingresos por la publicidad que se venda ahí sean para el Teatro".

¿Cuál ha sido la estrategia seguida para disminuir la deuda?
"Tras el análisis de lo que había que hacer para sacar adelante al teatro lo que hicimos fue racionalizar los costos, por ejemplo, en todo lo que es producción técnica, instalando los talleres en un lugar distinto, con infraestructura adecuada. Esto permitió bajar los costos en aproximadamente $400 millones".

"Eso significa, incluso, que el teatro estaría actualmente en condiciones, a través de sus talleres, de exportar escenografía a otros países que tienen mayores costos, lo que podría ser un ingreso adicional muy interesante. Si en este minuto nos encargaran una escenografía estaríamos en condiciones de hacerla".

¿Además del cambio de localización de los talleres, qué otra forma han utilizado para bajar los costos?
"Además de la racionalización que recién te explicaba hemos bajado otros $400 millones en costos artísticos, al limitar la puesta en escena, reponiendo algunas obras".

"También hemos tenido una baja en lo que son gastos generales y de administración, con aproximadamente mil millones de pesos de ahorro".

"Se producido economías de escala, siempre con un trabajo muy ordenado, y con énfasis en costos por objetivos, y eso ha funcionado muy bien".

Verónica González explica que "la idea es efectuar menos pasos para lograr lo mismo"; en otras palabras, hacer un buen uso del  presupuesto del teatro el que cuenta con alrededor de $9 mil millones.

"El año 2001 tuvimos mil millones de pesos en déficit que se pagaron con deuda, llegando a una deuda total de 2.700 millones de pesos. El 2002, en cambio, redujimos esa déficit a 2.190 millones de pesos, y los costos se redujeron a niveles en que logramos obtener utilidades".

González explica que además de los resultados obtenidos durante el 2002, el público asistente a los espectáculos aumentó en un 58%. "También se incrementaron los ingresos, porque como no podíamos modificar los aportes estatales ni municipales, nosotros trabajamos para incentivar los aportes de los privados, a través de la Ley de Donaciones culturales".

¿Cómo ha sido la labor para impulsar al sector privado a que entregue su aporte?
"Para incentivar a los privados lo que hicimos fue abrir el teatro mucho más allá de sus paredes, cosa que ya se hacía en el pasado, pero ahora de forma mucho más agresiva, masificando el acceso a la cultura musical de excelencia, a través de los ensayos, los que se transformaron en presentaciones abiertas a todo público".

"Además hicimos un festival de verano donde remontamos 'La Traviata', 'La Bella Durmiente' y además se tocó la Novena Sinfonía en la Estación Mapocho. En esa oportunidad fue Ripley quien se puso para llevar a cabo el espectáculo".

"La ley de donaciones culturales permite que una empresa done el 2% de tus utilidades líquidas a un proyecto cultural; pero el derecho de donar ese 2% te obliga a poner un 2% de costo tuyo. Entonces, para que fuera más atractivo para el sector privado, sería bueno que se agilizaran las cargas".

¿Cómo se justifican estos aportes?
"En la medida que tú logras entregarle al pueblo de Chile lo que necesita empiezan a tener justificación los aportes que realiza el Estado y los privados, quienes satisfacen una necesidad aspiracional de sus clientes, al darles la oportunidad de tener acceso a este tipo de eventos culturales. Entonces se genera todo un círculo virtuoso que se va cerrando y que va permitiendo crecer en cultura".

¿Qué le parece el nuevo proyecto?
"Me parece muy interesante porque nuestra sala actual del teatro es pequeña y el escenario no es doble por lo que se generan muchos tiempos ociosos donde no se puede aprovechar bien la sala. En cambio, la nueva sala es de mayor capacidad y permite que estemos dando espectáculos extraordinarios".

"Lo principal del nuevo proyecto es que es un teatro rentable, que no nace con artistas incorporados sino que se traen artistas o grupos en la medida en que tú sepas que vas a vender las entradas en un precio que te financie los costos y te deje una ganancia".

"El Teatro Municipal tal como está hoy día nunca se va a financiar como negocio rentable; sí es rentable para el país tenerlo como un activo cultural y se va a financiar en forma de equilibrio con donaciones y aportes del Estado, pero nunca se va a financiar sólo con la venta de las entradas".

"La nueva sala, en cambio, sí será rentable porque no tendrá como costo fijo los cuerpos estables del teatro actual. Éstos seguirán funcionando como hasta ahora lo han hecho, pero será un costo que no absorberá el nuevo proyecto".

¿Cómo se espera este año?
"El año 2003 va a ser un año complejo. Esperamos que se repita el crecimiento que obtuvimos el año pasado, aunque esto siempre va acompañado con los proyectos del teatro que no son infinitos".

"Las expectativas son tener nuevamente un presupuesto equilibrado, bajar algo más la deuda y crecer un 40% en público, adicionalmente".
Nosotros esperamos que la deuda se termine de pagar en 4 ó 5 años más. El año pasado ya pagamos como $600 millones y este año queremos pagar un poco menos.