SANTIAGO.- "Boicot Desinversión Sanciones Chile 'Contra la colonización, el apartheid y la ocupación israelí'", así se llama la organización local que tiene prohibida la entrada al país liderado por Benjamin Netanyahu, según una "lista negra" dada a conocer este domingo por Israel.
Se trata del único movimiento en América Latina que integra una iniciativa propalestina y que en Chile es difundida a través de un blog. En él, el periodista israelí antisionista y director del Centro de Información Alternativo de Jerusalem, Sergo Yahni, explica de qué se trata el movimiento a nivel global en una entrevista de YouTube.
"Es un instrumento en manos de la sociedad civil y de los movimientos sociales para demandar al Estado de Israel una contabilidad por sus actos y romper la impunidad que se ha creado en la comunidad internacional con respecto a las acciones de Israel", precisa.
Además añade que lo que buscan es que la comunidad internacional boicotee a Israel. "Siempre que el Estado de Israel siga violando la ley internacional, la llamada no es contra el Estado de Israel por su mera existencia sino que es porque el Estado de Israel se encuentra en una situación permanente de violación de la ley internacional y se ve al BDS como una herramienta para forzar a Israel a cumplir con la ley internacional y a cumplir con las decisiones de Naciones Unidas".
En el sitio web de BDS Chile se detallan ocho productos que forman parte del boicot comercial, entre ellos, artículos de la tienda "Judaica Monte Tzion".
Ese espacio está dedicado a la venta de libros de Torah y judaísmo, en hebreo y español, adminículos religiosos como: talit, menorah, shofa, mezuzah, kipa y tefilín.
Artículos de belleza elaborados con productos del Mar Muerto, trajes de baño fabricados en Israel y objetos destinados para la jardinería también están prohibidos. Incluso se detalla dónde se comercializan en Chile.
Otras de las etiquetas con las que cuenta el sitio abordan acciones a seguir, declaraciones de principios, seminarios y noticias.
El gobierno de Netanyahu aprobó la semana pasada un presupuesto para luchar con este tipo de organizaciones, llevando a cabo una campaña nacional antiboicot consistente en un presupuesto de US$75 millones.
