SANTIAGO.- La tormenta que azota a Colo Colo, lejos de aminorar, siguió cobrando fuerza este miércoles con la renuncia del presidente Peter Dragicevic, a la que se suma la negativa del delantero Héctor Tapia a que le rebajen el sueldo en 70 por ciento, como anunció el síndico de quiebras.
A través de una declaración pública, el presidente del directorio del cuadro popular reconoció su dimisión "para favorecer el clima necesario que permita reestructurar el funcionamiento del club", declarado en quiebra el 23 de enero pasado por la justicia a raíz de deudas impagadas por 59 millones de pesos con la empresa Alianza Chilena de Leasing, con la que tiene una deuda total de poco más de 400.000 dólares.
Las investigaciones han determinado innumerables irregularidades que implicaron la intervención del síndico de quiebras, quien entre otras medidas para pagar a los acreedores, propuso rebajar los gastos de la institución desde 300 millones a sólo 90 millones de pesos al mes, lo que en parte se cumpliría con la disminución de los sueldos de los jugadores en 70 por ciento.
La propuesta no satisfizo, por ejemplo, al goleador del club, Héctor Tapia, quien anunció que no seguirá en el plantel. La rebaja le implicaba quedar ganando un millón 250 mil pesos mensuales, lo que no fue aceptado por el jugador, quien además dijo que se acogerá a una disposición de la FIFA que le permite recuperar su libertad de acción por incumplimiento de contrato por parte del club, ya que hace cuatro meses que no le pagan el sueldo.
En tanto, el volante argentino Marcelo Espina desmintió que haya renunciado a Colo Colo. "Sigo siendo parte del plantel", dijo a la salida del Estadio Monumental.
