Con unos 1.000 caballos de fuerza y una velocidad máxima de casi 350 km/h y un alcance de hasta 640 km gracias a un sistema de propulsión eléctrica de última generación, el Lucid Air nace para complicarle la vida a Tesla.
El modelo es la ópera prima de Lucid Motors, cuya producción está programada para comenzar en 2019 en una nueva fábrica en Arizona.
Lo que distingue al Lucid Air de un Tesla Modelo S o de otros autos eléctricos de lujo es su tamaño, más pequeño y más bajo, pero con el espacio interior de un Mercedes Clase S.
Mejor todavía, el Lucid Air será autónomo en un nivel 4 o nivel 5 desde el principio. Esto significa que, como mínimo, podrá circular por cuenta propia en zonas donde cuente con toda la información sobre su entorno. Esta es la misma meta que persigue Tesla con su nueva generación de autos.
Por supuesto, para cumplir con esas características, el Lucid Air tiene un conjunto de sensores de cámaras y radares, tanto de largo como de corto alcance, para adquirir “conciencia situacional” en condiciones meteorológicas adversas y circunstancias de iluminación extrañas.
También contará con un procesamiento masivo de datos a bordo y también un terabyte de capacidad de almacenamiento de tales datos.