Las estrellas se alinearon para que dos espectaculares spiders vinieran al mundo casi al mismo tiempo como modelos de 2018: el McLaren 570S Spider y el Audi R8 Spyder V10 Plus.
Antes de ir a ellos, una aclaración: “spider” es un término empleado para indicar un tipo de carrocería descubierta y usualmente es aplicado por marcas que pretenden que su modelo tenga una connotación más deportiva; de lo contrario, los llaman simplemente cabrios o convertibles.
Como es obvio en estos casos, a las marcas les da lo mismo escribir “sypder” o “spider”.
Dicho eso, el McLaren 570S Spider tiene un techo descapotable compuesto de dos piezas y que añade solo 46 kilos al modelo (respecto del 570S coupé) mientras que la rigidez del conjunto se mantiene inalterada.
Es posible desplegar o plegar de forma eléctrica la capota en solo 15 segundos y mientras el vehículo está en marcha, hasta a una velocidad de 40 km/h.
El McLaren 570S Spider incorpora además un deflector para el viento que puede ser accionado eléctricamente a través de un botón. Así reduce el flujo de aire con la capota plegada o aumentar la sensación de sonido y el flujo de aire si se circula con la capota desplegada.
La maquinaria propulsora consiste en un V8 de 3,8 litros y 570 caballos de vapor, asociado a una transmisión automática de 7 velocidades. Según la marca, acelera de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos y su velocidad máxima es de 328 km/h si la capota va puesta o de 315 km/h si va retraída.
Desafío alemán
Casi al mismo tiempo que era revelado el spider de McLaren, su rival alemán Audi destapaba su R8 Spyder V10 plus.
La gracia es que a diferencia del R8 Coupé y del Spyder a secas, que tienen motores con 540 caballos, el recién aparecido tiene un motor atmosférico de 5,2 litros que genera 610 equinos y un par motor que llega hasta los 560 Nm.
Va de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos y logra una velocidad máxima de 328 km/h. La caja de cambios es la automática S tronic de 7 velocidades y doble embrague, que pasa la fuerza del motor a la tracción 'quattro' mediante un embrague multidisco con control electrohidráulico en el eje delantero.
El R8 Spyder V10 Plus combina componentes de aluminio (que representan el 79,6 % del peso) con piezas de polímero reforzado con fibra de carbono, entre las cuales se cuentan los asientos, el sistema de frenos de carbono y cerámica y las llantas de aleación liviana. Gracias a todo eso, el auto pesa en seco 1.587 kilogramos, 25 menos que el R8 Spyder V10.
La capota, que pesa 44 kg, se puede quitar o poner de forma automática en 20 segundos y hasta velocidades de 50 km/h.
Para los de piel delicada, el R8 convertible tiene asientos deportivos tapizados con cuero Nappa que tiene una pigmentación que impide que se calienten con los rayos del sol.