SANTIAGO.- Porsche reveló en nuestro país dos de las joyas de su corona: los 911 GTS y GT3. Ambas variantes del icónico deportivo alemán desplazan su posicionamiento aún más hacia el lado deportivo, llegando en el caso del GT3 a niveles bastante extremos.
A pesar de que los dos modelos constituyen las variantes más actuales de la presente plataforma del 911, de hecho ambas tienen una personalidad bastante única.
En el caso del Porsche 911 GTS (Gran Turismo Sport) por primera vez incorpora un motor turboalimentado (de hecho tiene dos turbos), que desplaza 3 litros y produce 450 cv y 550 Nm; o sea 20 caballos más que el GTS de años anteriores.
Dotado con una caja automática de doble embrague, este modelo puede ir de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos y alcanzar una velocidad superior a 300 km/h.
Estéticamente se diferencia de otros 911 por su frontal que exhibe 5 tomas de aire y por tener un parachoques con un borde inferior más extenso. Los faros con borde oscuro, así como las ópticas traseras oscurecidas le dan un toque distintivo a esta variante.
De acuerdo a ejecutivos de Ditec, el modelo llega a nuestro país con el paquete Sport Chrono, que permite gestionar el rendimiento deportivo del conductor, de manera estándar. En cambio se puede optar por dos tipos de asiento, uno de los cuales es una butaca deportiva.
Están disponibles 5 versiones del 911 GTS: coupé, cabrio, Carrera 4 y Targa, estos dos últimos con tracción integral, con un rango de precios que va entre los US$163.000 y los US$184.900.
Listo para las pistas
En cuanto al Porsche 911 GT3, se trata de una versión bastante más extrema desde el punto de vista deportivo, aunque según Alfredo Gantz, gerente de la marca, la edición 2018 está mucho más orientada al conductor.
Aún así, se trata de un auto que está concebido para las pistas. Tiene disponibles, por ejemplo, un paquete de competición que incluye asientos deportivos con cinturones de seguridad de 6 puntas y estructura interna antivuelco, así como opción para frenos de acero o cerámicos.
Estéticamente se le puede identificar por tener un frontal con entradas de aire mucho mayores y una carrocería que agrega una carga aerodinámica de hasta 155 kilos, compuesto por spoiler delantero y un prominente alerón posterior que es 20 mm más alto que el del GT3 previo.
Además, gracias al empleo de fibra de carbono en su carrocería, así como de un carenado trasero de este material combinado con microesferas de vidrio, se logró que el auto fuera significativamente más liviano.
Pura potencia
La maquinaria propulsora es de 6 cilindros, bóxer naturalmente, de 4 litros y una potencia de 500 cv y 460 Nm. Esto significa que tiene 25 caballos y 20 Nm más que la generación previa de deportivo.
Hay dos opciones de transmisión: una caja de cambios PDK (automática de doble embrague) de 7 velocidades o una manual de 6 cambios cuya mayor virtud es que pesa 17 kilos menos que la otra. Además, el eje trasero es direccional.
Con estas características, puede ir de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos, mientras que a los 11 segundos llega a los 200 km/h. Su velocidad máxima es de 318 km/h.
Su precio depende de la configuración elegida por el cliente, pero ronda los US$194.000.
