SANTIAGO.- El sector automotor vivirá en los próximos años un verdadero “boom” y de aquí a 2030 podría prácticamente duplicar su facturación, sobre todo por los cambios revolucionarios que se avecinan, pronosticaron hoy expertos que analizaron el futuro del automóvil.
En los próximos 12 años la facturación aumentaría de los 3.400 millones de dólares actuales a por lo menos 6.600 millones de dólares en 2030, de acuerdo al estudio presentado hoy por la consultora McKinsey. Los factores que determinarían el crecimiento son las prestaciones de nuevos servicios de movilidad, los autos autónomos y energías alternativas. Lo que hoy representa apenas un 1% de la facturación global en el sector, aumentaría en forma exponencial hasta cubrir una cuota del 25%.
“La industria automotriz tendría una época dorada, siempre y cuando sepa resolver los cambios disruptivos que se avecinan”, explicó Andreas Tschiesner, director europeo de McKinsey para el área automotor.
Eso sí, ningún constructor estaría en condiciones de resolver los desafíos ni de realizar las extraordinarias inversiones necesarias de manera independiente. “El éxito dependerá en el futuro del manejo de las alianzas que se tejan”, señaló Timo Möller, uno de los autores de la investigación.
El estudio advierte que las compañías automotrices se convertirían en prestadores de servicios de movilidad, ofreciendo nuevos servicios complementarios como nuevas aplicaciones, modelos de carsharing, servicios de transportes y organización de tránsito. Adicionalmente, el sector atendería la demanda de autos con motores eléctricos y de conducción autónoma, fenómeno que recién se podría apreciar en algunas ciudades en poco más de tres años, en 2021.
