SANTIAGO.- Este fin de semana el Koenigsegg Agera RS se proclamó como el auto de producción más rápido del mundo, tras alcanzar una velocidad máxima certificada de 447,2 km/h. De esta manera, el fabricante sueco pulverizó el anterior registro de 435,31 km/h que estaba en manos del Hennessey Venom GT.
Para lograr esta hazaña, el piloto de pruebas de Koenigsegg, Niklas Lilja, realizó dos pasadas en una sección de cerca de 19 kilómetros cerrada al público de la Autopista 160 entre Las Vegas y Pahrump, en Estados Unidos.
En una de las pasadas el Koenigsegg Agera RS alcanzó una velocidad máxima de 436,44 km/h, mientras que en otra llegó hasta unos impresionantes 457,94 km/h. De esta manera, el récord oficial quedó establecido en 447,2 km/h (promedio entre ambos intentos).
Tras el exitoso intento, Niklas Lilja señaló no haber estado nervioso y que la única duda estaba en los neumáticos (Michelin Pilot Sport Cup 2), ya que no se sabía qué podría pasar.
El hiperdeportivo sueco tiene un peso de apenas 1.395 kg y cuenta con un motor V8 biturbo de 5 litros con 1.160 caballos de fuerza y 1.280 Nm de torque a 4.100 rpm, asociado a una transmisión automática de doble embrague de siete velocidades.