SANTIAGO.- Este jueves debuta en Netflix una serie pensada y hecha para los fanáticos de los autos y la velocidad. Fastest Car es el nombre de la producción que intentará llevar hasta sus pantallas toda la adrenalina que se vive en la cultura del motor en los Estados Unidos.
Según se ha revelado, la serie, en formato de reality show, llama la atención desde el primer minuto por las emocionantes carreras que se registran en distintos escenarios y donde destacan algunos de los superdeportivos más espectaculares que existen en el mundo.
Pero eso no es todo, ya que los "pilotos callejeros" de estos modernos y veloces vehículos pondrán sus credenciales en juego al enfrentar a otros amantes de lo motores que sin tener el dinero suficiente para adquirir ese tipo de deportivos aceptan los retos con antiguos autos que son modificados para que puedan alcanzar velocidades inimaginables e iguales prestaciones al conducir.
“El dinero no siempre puede comprar velocidad” dice la frase fuerza de la nueva producción Netflix y precisamente esto es lo que entrega, una fuerte dosis de adrenalina al enfrentar modernas máquinas europeas como Ferrari y Lamborghini, de más de 300 mil dólares, a vehículos que a simple vista parecen ser chatarra, pero que debajo de su capó esconden verdaderos monstruos de velocidad.