Un estudio realizado por investigadores de la Universidad del Estado de Georgia, Estados Unidos, reveló que existe una relación directa entre el desempeño escolar de los niños y el estado del vehículo que utilizan para transportarse a sus lugares de enseñanza.
El análisis comparó, en un periodo de diez años, las calificaciones obtenidas por los estudiantes de distritos escolares que adaptaron sus buses para reducir las emisiones hasta en un 95% y otros que mantuvieron en operaciones vehículos antiguos con motores diésel.
El resultado reveló que los estudiantes que fueron transportados en buses modernizados tuvieron puntuaciones significativamente más altas en inglés y un poco mejor en matemáticas.
Según indica el escrito, las mejoras académicas son casi comparables a reemplazar a un maestro con un año de experiencia por uno de cinco o más años.
Los investigadores dijeron, según publica el sitio Jalopnik, que los distritos analizados son idénticos en su funcionamiento y operatividad salvo por su flota de vehículos para transportar a los estudiantes. De esta manera evitaron que otros factores, como un cambio en sus políticas de salud o alimentación, hayan influido en el resultado.
“Empleamos una prueba de placebo al verificar también los cambios en el índice de masa corporal (IMC) de los estudiantes. Si los distritos de remodelación se estuvieran volviendo más saludables de todos modos, también veríamos cambios en el IMC. Sin embargo, no esperamos que las modernizaciones del bus afecten directamente el IMC”, dijeron en el sitio web de Brookings Institution.
Aún cuando estos resultados no son calificados como 100% determinantes, otros análisis realizados en Estados Unidos vienen a apoyar sus conclusiones. Es el caso de un estudio que determinó que los niños inscritos en establecimientos cercanos a autopistas o avenidas con mucho tráfico y contaminación también experimentan caídas en los puntajes de sus pruebas, además de registrar más ausencias y problemas de comportamiento.
