Un estudio realizado por la Universidad de Surrey, en Reino Unido, determinó que conducir un automóvil con las ventanas abiertas puede aumentar la exposición de los pasajeros a la contaminación ambiental en hasta un 80%.
La investigación se realizó en diferentes ciudades en plena hora punta. Dhaka (Bangladesh), Chennai (India), Guangzhou (China), Medellín (Colombia), Sao Paulo (Brasil), El Cairo (Egipto), Sulaymaniyah (Irak), Addis Abeba (Etiopía), Blantyre (Malawi) y Dar-es-Salaam (Tanzania) fueron los lugares analizados.
En ese sentido, el estudio abarcó lo niveles de exposición a las partículas en suspensión de menos de 2,5 micras (PM2,5) y PM10 dentro de los vehículos cuando estos circulaban por las ciudades en las horas punta de mañana y noche.
Otra de las conclusiones a las que llegó la investigación es que las altas dosis de contaminación se reflejaron en automóviles que circulaban a velocidades bajas y realizaban viajes más largos.
Por otro lado, la publicación también destacó la eficacia de los filtros de los vehículos para evitar mayores niveles de contaminación en su interior.
Según informó la revista Science of the Total Environment, se utilizaron contadores de partículas láser portátiles para desarrollar una aproximación de los perfiles de exposición de los usuarios de automóviles y analizar los factores del material particulado.