Más de 750 dueños de automóviles Tesla han denunciado ante los reguladores federales en Estados Unidos que sus vehículos, operando con el sistema de conducción semiautónoma, han frenado repentinamente y sin razón obvia mientras transitaban por distintas vías, poniendo en riesgo a los ocupantes de los coches o de quienes se desplazaban por esa rutas.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras reveló la cifra en un pedido detallado de información a Tesla publicado en el portal de la agencia este viernes.
La carta de 14 páginas, fechada el 4 de mayo, pide al fabricante todos los reportes de consumidores y de campo que ha recibido sobre frenado en falso, además de reportes de heridos, choques, muertes y daños a la propiedad.
En el requerimiento se pregunta además si los sistemas de "Conducción Autónoma Plena" y de frenos automáticos de emergencia estaban activados en el momento de alguno de los incidentes.
La agencia comenzó a investigar el frenado fantasma en los Model 3 e Y de Tesla en febrero pasado tras recibir 354 quejas. La pesquisa cubre unos 416.000 vehículos del 2021 y 2022. En febrero, la agencia dijo que no tenía reportes de choques ni heridos.
La carta le dio a Tesla un plazo hasta el 20 de junio para responder a los pedidos de información, pero dice que la compañía puede pedir una extensión.
Las acciones de Tesla se desplomaron 7% al arranque de la jornada en Wall Street, tras conocerse la noticia.
Al iniciar la investigación, la agencia reguladora dijo que estaba examinando vehículos equipados con sistemas de asistencia automatizada a la conducción como el auto crucero y el "piloto automático", que les permite a los coches frenar y manejar automáticamente dentro de los carriles.
"Las quejas reportan que la rápida desaceleración puede ocurrir sin aviso y a menudo reiteradamente durante un ciclo de conducción", dijo la agencia.
Muchos dueños de autos escribieron en sus quejas que temían ser embestidos por detrás en la carretera.
