Los vehículos del fabricante estadounidense Tesla que circulan por las calles y carreteras de China podría ser prohibidos por un periodo de dos meses en el distrito costero de Beidaihe, un balneario al este de Beijing, y que será sede de un cónclave anual secreto que realizan las máximas autoridades del partido gobernante.
La información, publicada por la agencia Reuters, indica que la restricción se hará efectiva a partir del 1 de julio próximo según confirmó este lunes una fuente de la policía china que pidió mantener su nombre en reserva.
La decisión de las autoridades de Beidaihe, añade el reporte, se produce pocas semanas después de que a principios de junio también se prohibiera a los automóviles Tesla circular por algunas carreteras de la ciudad central de Chengdu, lo que coincidió con una visita del presidente chino, Xi Jinping, a la urbe.
Consultado por Reuters el agente policial no dio razones puntuales sobre esta decisión en contra de los vehículos Tesla y se limitó a decir que se trata de "asuntos nacionales" y que la información sería anunciada oficialmente en las próximas horas o días.
Esta no sería la primera vez que los autos altamente tecnologizados del fabricante estadounidense son cuestionados por las autoridades chinas ante el temor que sean utilizados para espiar, mediante sus cámaras y sensores, las actividades del gobierno.
Cuando los Tesla comenzaron a comercializarse en ese importante mercado asíatico surgieron inmediatas dudas respecto de la información que recopilan y se recomendó a los altos funcionarios no usarlos en actividades de su cargo.
En ese contexto, incluso se le exigió a Tesla que la información recopilada por los coches fuera almacenada únicamente en instalaciones especiales en China y no en otros países.
El año pasado, el ejército chino prohibió que los automóviles Tesla ingresaran a sus complejos, citando preocupaciones de seguridad sobre las cámaras instaladas en los vehículos.
Elon Musk, Ceo y cofundador de la compañía, dijo en ese momento que los autos de Tesla no espiaban en China ni en ningún otro lugar, y que la compañía cerraría si lo hacía.
Beidaihe es un balneario ubicado al este de Beijing y tradicionalmente sirve de escenario para un cónclave de verano de los principales líderes de China donde discuten movimientos de personal e ideas políticas a puerta cerrada.
