Las cosas no van bien para el fabricante de camiones y buses Hino luego que las autoridades japonesas iniciaran una investigación en su contra acusado de haber comercializado desde 2019 unos 76 mil vehículos con motores que no fueron sometidos a todas las pruebas de emisiones que se exigen para su certificación.
Ahora Toyota, dueña de más del 50% de las acciones de la empresa, informó que Hino fue expulsada de la Asociación Commercial Japan Partnership Technologies (CJPT), una instancia creada en 2021 para facilitar el desarrollo de tecnología para vehículos comerciales.
El grupo está conformado por Toyota, Isuzu Motors, Suzuki Motor Corp y Daihatsu, miembros que estuvieron por apoyar la drástica sanción.
“Creemos que la participación de Hino causará inconvenientes a las partes interesadas y hemos decidido que es apropiado expulsar a Hino del CJPT”, dijo el presidente de Toyota, Akio Toyoda, en un comunicado.
Ante esta decisión, el comunicado añade que la participación accionaria del 10% de Hino en CJPT podría ser transferida a Toyota.
“Tomamos esta decisión muy en serio”, dijo Hino en un comunicado en respuesta a la expulsión del CJPT, y agregó que estaba trabajando para corregir los problemas que llevaron a la mala conducta.
Respecto de los planes que ya están en marcha y que involucran al cuestionado fabricante de camiones, Toyota dijo que Hino "desempeñará un papel mínimo" en un proyecto previamente anunciado y que comenzará en 2023 para desarrollar pequeñas camionetas comerciales eléctricas y camiones eléctricos de celda de combustible de servicio liviano para transportar mercancías entre Tokio y la prefectura de Fukushima. Pese a ello, queda excluido de la planificación conjunta y otros acuerdos de la sociedad.