El gigante de la industria automotriz Hyundai Motor, de Corea del Sur, anunció que antes de que finalice octubre comenzarán las obras de construcción de una moderna planta en Estados Unidos donde se fabricarán los nuevos modelos cero emisiones de la marca y baterías para autos eléctricos.
Según indicó la marca, el proyecto tendrá un costo total de unos 5.500 millones de dólares y la idea es que la primera parte de las instalaciones, destinada a la fabricación de vehículos eléctricos, comience a operar a mitad de 2025 con una producción anual estimada en unas 300 mil unidades.
El mega complejo del Grupo Hyundai estará emplazado en Savannah, Georgia, y su inversión es parte de los 10.000 millones de dólares que el conglomerado se comprometió a invertir en Estados Unidos para fomentar la movilidad eléctrica en ese mercado.
La inauguración de las obras tuvo lugar en medio del malestar manifestado por Corea del Sur y la Unión Europea ante las medidas proteccionistas adoptadas por la administración Biden y que limita la entrega de subsidios estatales para la compra de vehículos eléctricos a modelos fabricados exclusivamente en Estados Unidos, incluídas las baterías de las que se exigirá que sus materiales provengan de mineras locales o asociadas.
La Ley de Reducción de la Inflación, firmada por Biden en agosto, hizo que alrededor del 70% de los vehículos eléctricos no fueran inmediatamente elegibles para los créditos fiscales de hasta 7.500 dólares por vehículo.
Biden ha expresado su voluntad de continuar las conversaciones con Corea del Sur sobre la reciente legislación estadounidense que niega los subsidios a la mayoría de los fabricantes extranjeros de vehículos eléctricos (EV), dijo Corea del Sur a principios de este mes.
Biden también ha elogiado repetidamente las inversiones de los principales fabricantes de automóviles extranjeros para construir vehículos eléctricos y plantas de baterías en los Estados Unidos, incluido un anuncio de Honda Motor y LG Energy en cuanto a invertir cerca de 4.400 millones de dólares en una planta de baterías en Ohio.
Biden dio la garantía en una carta al presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, quien le había pedido ayuda al presidente de Estados Unidos el mes pasado para disipar las preocupaciones de Seúl de que las nuevas reglas estadounidenses perjudicarían a los fabricantes de automóviles de Corea del Sur, informó Reuters.
Como resultado de la ley de agosto, solo unos 20 vehículos eléctricos califican para subsidios según las nuevas reglas, entre ellos modelos de Ford Motor Co y BMW.
