La Asociación Europea de la Electromovilidad (Avere) valoró que los países del Viejo Continente hayan superado los 600.000 puntos de carga para vehículos eléctricos, cifra que se alcanza a "sólo unos meses" después de haber superado los 500.000 puntos de repostaje.
La cifra final se conoció con los últimos datos revelados por el Observatorio Europeo de Combustibles Alternativos (EAFO) y fue calificada como una "excelente noticia" para la movilidad sostenible en Europa donde los eléctricos están ganando popularidad entre sus consumidores, así como el compromiso del Gobierno y las partes interesadas de la industria.
Según Avere, este hito es muy importante porque es una muestra de la aceleración de la transición de los vehículos tradicionales hacia los eléctricos y la gran inversión que están realizando tanto gobiernos como organizaciones para crear un entorno para que comprar un vehículo eléctrico sea "convincente y accesible para todos".
Asimismo, la organización destacó la importancia de la reducción de las emisiones de carbono a través de los vehículos eléctricos y las oportunidades económicas que significa una expansión de la infraestructura de carga, desde la instalación y el mantenimiento de las estaciones hasta el desarrollo de nuevas tecnologías y servicios en el sector.