Directora de "Rara", premiada película sobre una familia homoparental: "Está hecha para los no convencidos"

SANTIAGO.- Han pasado 13 años desde que la jueza Karen Atala inició una batalla judicial con su ex esposo por la custodia de sus hijas. La abogada se convirtió en emblema de las madres que sufren discriminación por su orientación sexual, y desde un inicio su caso llamó la atención de la cineasta Pepa San Martín. La asistente de dirección de filmes como "Kiltro" e "Ilusiones ópticas" se interesó profundamente en la temática de las familias homoparentales, y por ello fue natural que decidiera plasmarlo en la pantalla grande a través de "Rara", su primer largometraje.

Protagonizada por la joven actriz Julia Lübbert, la cinta muestra la mirada de una niña de 12 años a su entorno familiar. La preadolescente, Sara, vive con su hermana menor (Emilia Ossandón), su madre (Mariana Loyola) y la pareja de ésta (Agustina Muñoz). Si bien las dos menores están bajo la tutela de su progenitora, también tienen una relación cercana con su padre (Daniel Muñoz) y con la segunda esposa de él (Sigrid Alegría). No obstante, la armonía empieza a tambalear cuando se cuestiona el rol de la madre, tal como le ocurrió a Atala.

"Fue un caso que seguí de cerca por una motivación personal", dice San Martín al recordar el proceso judicial de la abogada. "Me pareció muy fuerte, y no sabía que se convertiría en el tema de mi primera película. Cuando yo decidí hacer un largometraje, me di cuenta que quería hablar de los temas que me generan un interés personal. Me parece que el caso de Karen es emblemático, ella decidió pasar su caso personal a un caso político, pero hay muchos parecidos. Hay algunos que ni siquiera llegan a juicio porque las familias sienten vergüenza. Entonces a medida que más investigaba acerca del asunto, más cosas quería rescatar para la película", cuenta la realizadora.

La directora del elogiado cortometraje "La ducha" (2011) estrenará la cinta el próximo 27 de octubre en Chile, luego de haber sido aplaudida en los festivales de Berlín y San Sebastián. En el primero se llevó el premio del jurado internacional, mientras que en el segundo se adjudicó el galardón Horizontes Latinos y el Sebastiane Latino 2016 (cedido a cintas con temáticas LGBT).

"En el extranjero nos ha ido súper bien, la película ha tenido premios políticos y cinematográficos. Pero Chile es un lugar donde uno se pone muy nerviosa", explica la directora, quien asegura que la historia de Sara llega en un momento en que el cine nacional está respaldando la voz ciudadana que exige mejoras y justicia social.

"Creo que la película pasa a sumar a estos cambios sociales que queremos. No es coincidencia que las últimas películas chilenas estrenadas estén inspiradas en casos reales (como "Aquí no ha pasado nada", basada en el caso de Martín Larraín)… El cine está volviendo a tener una voz más callejera, volver a tocar los temas que en la calle importan. Esta película no está hecha para convencer a los convencidos, sino que está hecha para los que no están convencidos. Es ahí donde queremos entrar", comenta.

El conflicto central de "Rara" es complejo, de eso no hay dudas. Pero al ser presentado desde la óptica de una niña, la directora lo aborda con sutileza e inocencia. "Yo sé que la gente lo va a pasar bien en la película, además es distinta a lo que estamos acostumbrados del cine chileno. Habla de emociones, te vas a reír, a emocionar, vas a reflexionar, y esa es la potencia que le dan los niños", comenta.

El fichaje de Lübbert y Ossandón fue el gran acierto de San Martin en este filme. "Si las niñas no funcionaban, no teníamos película", dice. La directora estuvo cuatro meses buscando a la actriz que interpretaría a Sara, hasta que sintió haberla encontrado al ver por primera vez a Julia. "Tuve la certeza cuando la vi entrar al casting. Ella estaba atrasada, y dijo 'perdon, llegué atrasada' y de alguna forma vi que ella era la elegida. Ese mismo día le pregunté si le interesaba y la seleccioné inmediatamente".

Posteriormente, antes del rodaje, San Martín hizo un taller de cuatro meses para fortalecer los lazos entre las niñas. Y eso se nota en pantalla. "Nosotras no esperamos armar la relación sólo para la película. Ellas hasta el día de hoy son amigas, se quieren, se conocen. Fuimos juntas a la piscina, nos juntamos en mi casa a tomar once, a pintar. Nos aburríamos juntas...como es la vida misma. Tratamos de ser lo más honestas".

El guión fue escrito por la cineasta junto a la reconocida directora Alicia Scherson, con quien ha trabajado en distintos proyectos desde el año 2004. "En todo mi trabajo con Alicia salgo lucrada. Es mi amiga y trabajar con amigos siempre viene bien. Nos conocemos desde hace mucho tiempo, entonces el proyecto se produjo desde un foro muy íntimo. Hicimos una muy buena dupla, y el guión tiene muchas cosas de Alicia, y otras que son mías. Y hoy nos sentamos y no sabemos qué es de quién. Eso es súper interesante, porque la obra trasciende al autor”, concluye.