SANTIAGO.- Luego del éxito obtenido en 2015 por Ed Sheeran, el británico decidió recluirse por un tiempo, vivir de los dividendos obtenidos gracias a su álbum X, editado en 2014. Para ello, y según confesó, hizo lo que "cualquier persona con mucho dinero haría": comprarse una gran casa, instalar un pub y salir de juerga con estrellas globales de su misma estatura, como Justin Bieber. Mención aparte que nace de esta "reunión" es el capítulo en que Sheeran golpea con un palo de golf al canadiense, el mismo a quien le obsequió el tema "Love yourself" porque "no iba a estar en ninguno de mis álbumes. Creo que no tendría tanto éxito si la hubiese cantado yo", aseguró el cantante y compositor británico.
En buena medida, esta pausa de tres años para arribar a Divide, su más reciente disco, tiene que ver con el ambiente relajado que antecedió a su creación y que, según asegura el pelorrojo artista, es su mejor trabajo a la fecha. Esto, claro, es el primer indicio de que las cosas podrían resultar de modo contrario a lo que se anuncia; generalmente, cuando se esgrimen argumentos absolutistas destinados a la galería, los resultados suelen ser, si no menores, por lo menos bastante más alejados de la teoría inicial. Además de este punto, que Sheeran haya declarado que "nunca" tarda más de una hora en escribir una canción (la edición de lujo de Divide contiene 16, más las que tiene guardadas o regala a sus amigos), oculta entre sus aptitudes de compositor veloz una desidia –soterrada, por cierto– por el valor de la canción pop como pequeña pieza de arte. Justo hace cuarenta años, cuatro muchachos de Liverpool dieron cátedra sobre esto.
Dicho esto, para entender este nuevo éxito comercial de Sheeran –el 10 marzo, el cantante supo que 672 mil copias de Divide se habían vendido en el Reino Unido, alcanzando el récord de ser el disco de un solista masculino que más rápido ha alcanzado esa cifra– hay que separar el contenido artístico con el alcance masivo del mismo. En el primer apartado, Sheeran realiza pocos cambios en relación a su otrora exitoso X. Vale decir, se utilizan recursos como el hip-hop ("Eraser"), la balada romántica facilista que se presenta en casi todo el registro, y de las que se extraen versos como "Ain’t nobody hurt you like I hurt you/Ain’t nobody love you like I do/Promise that I will no take it personal, baby/If you’re moving on with someone new", de "Happier", o "She’s the sweetest that I know/You should see the way she holds me when the lights go low", de "Hearts don’t break around here". Esos elementos, ya explorados (y explotados) por Sheeran, dicen que lo prolífico del compositor se traduce en una comodidad en su situación de estrella.
Sí, existen algunas variantes –mínimas– que evitan caer en la planicie permanente que es Divide. "Galway girl", por ejemplo, rompe en algo el esquema del disco al escudriñar en ciertas sonoridades galesas. Lo mismo la alegre "Barcelona", con Sheeran cantando frases sueltas su particular oda a la ciudad que más le gusta de la península ibérica. Asimismo, la suma de más instrumentaciones hacen que Divide suene a un álbum de banda a uno de un cantautor, algo que si bien ya estaba presente en el anterior esfuerzo del británico, se realza en este trabajo gracias a colaboraciones de la talla de Mike Elizondo o Steve Mac.
Disco monotemático, predecible y precario, el gran éxito que sigue obteniendo el británico con su nueva producción da indicios de que en el arte de hacer pop para las masas y disfrazarlo con edulcorados y pre-fabricados arreglos, Sheeran justifica sus ventas. Ciertamente, Divide posee un tono mucho más alegre que su antecesor lo que ha beneficiado en su rápida propagación, pero nos hallamos ante un registro que carece de sustento en sus canciones y que sólo se sostiene gracias a la personalidad del inglés, esa que atrae y que ya tiene agendados dos recitales en el Movistar Arena. La única interrogante que plantea ese show es si Sheeran se presentará con banda o seguirá en plan solista. Y esa, quizás, sea la única pregunta que se pueda hacer en torno a un álbum tan predecible como inocuo.
Ed Sheeran / “Divide” (2017, Atlantic)
Canciones:
1. Eraser, 2. Castle on the hill, 3. Dive, 4. Shape of you, 5. Perfect, 6. Galway girl, 7. Happier, 8. New man, 9. Hearts don’t break around here, 10. What Do I Know?, 11. How would you feel (Paean), 12. Supermarket flowers, 13. Barcelona, 14. Bibia be ye ye, 15. Nancy Mulligan, 16. Save myself.
Músicos: Ed Sheeran, Benny Blanco, Mike Elizondo, Johnny McDaid, Joe Rubel, Will Hicks.
Producción: Ed Sheeran, Benny Blanco, Mike Elizondo, Johnny McDaid, Will Hicks, Steve Mac.