SANTIAGO.- "Se necesitan políticos con alegría si hay que reencantar a la gente", señaló el comediante Juan Carlos "Palta" Meléndez a Emol este martes, luego de que adhiriera como militante del Partido Radical (RD). Días antes, su colega Daniel "Bombo" Fica realizó una acción similar: se inscribió en el Partido Comunista (PC), el cual está en proceso de refichaje de sus miembros.
Ligados al mundo del espectáculo, ambos humoristas se adentran en la política de distintas maneras: Meléndez firma nuevamente por el PR, pero esta vez con miras a una posible campaña para convertirse en diputado; mientras que Fica sólo firmó (por el momento) como un miembro más del partido liderado por Guillermo Tellier.
Teniendo en cuenta los contenidos de sus rutinas, así como el sello de ambos comediantes, es posible distinguir ciertas temáticas frecuentes en sus presentaciones, las cuales aluden directa o indirectamente al mundo del servicio público.
Qué esperar de "Palta" y "Bombo"
Juan Carlos Meléndez decidió seguir la tradición familiar de afiliarse al Partido Radical. A pesar de que lo había hecho a fines del año pasado, nuevamente firmó por el conglomerado en medio del refichaje que exige el Servicio Electoral. El objetivo es que alcance un mínimo de 18.500 inscritos hasta el próximo 14 de abril.
Conocido por sus imitaciones de personajes políticos como Ricardo Lagos, Andrés Zaldívar, Salvador Allende y Augusto Pinochet, el humorista oriundo de Copiapó, podría cultivar un perfil político ligado a la defensa de los Derechos Humanos y a la promoción de beneficios sociales, sobre todo en materia educativa.
En su rutina del Festival de Viña 2007, tras pleno movimiento estudiantil en 2006 —conocida como la "Revolución de los pingüinos", Meléndez inspiró su montaje en las protestas y las demandas que exigían los escolares de esa época, como la derogación de la LOCE, el término de la municipalización de la enseñanza, entre otros.
A diferencia del burlesco humor político del "Palta", Daniel Fica poco deja entrever en sus presentaciones su postura en ciertos rubros. Sin embargo, sí ha ironizado situaciones contingentes como la corrupción de las policías y la mala calidad del transporte público.
Sin duda dos figuras potentes para sus respectivos partidos, pero con diferentes aspiraciones. Hasta el momento, Meléndez sería el único con intenciones de quedarse con un puesto parlamentario, rol que él mismo aseguró "es un contrato con la ciudadanía". "Hay que hacer la pega bien para renovar el contrato si es que se ha hecho bien el contrato, sino patada y ahí mismo fuiste", sostuvo.