Francis y Claire Underwood están dispuestos a crear un ambiente de inseguridad en EE.UU. para vencer a Will Conway en las elecciones.
Netflix.
SANTIAGO.- Terror y ruptura con el protocolo. Esos son los elementos que describen la estrategia con la que Francis Underwood intentará mantenerse en la Casa Blanca en la quinta temporada de "House of Cards".
La serie protagonizada por Kevin Spacey y Robin Wright estrenará su nuevo ciclo el próximo 30 de mayo, y en él pondrá en marcha el plan que dejó entrever al final de la cuarta temporada.
La producción de Netflix culminó el año pasado con la publicación del reportaje de Tom Hammerschmidt (Boris McGiver), quien dio a conocer los delitos ejecutados por Underwood en su carrera por el poder.
Tras esto, el mandatario aprovechó el decapitamiento de James Miller (Sean C. Graham) en manos del grupo extremista ICO para desviar la atención y fortalecer su imagen pública. Es así como comienza a centrar sus esfuerzos en una (injustificada) "guerra" contra el terrorismo.
La serie creada por Beau Willimon se sumará a la parrilla de Netflix en medio de la cuestionada administración de Donald Trump, y las comparaciones entre la ética del verdadero Presidente y la ficticia autoridad demócrata no se han hecho esperar.
Esto seguramente se incrementará cuando la producción esté disponible en la plataforma de streaming, pues ya en el primer capítulo de la cuarta temporada Underwood parece hacer un guiño a Trump, al ejecutar acciones en el Congreso que escapan a los protocolos políticos de los parlamentarios.
Por otra parte, es evidente que la guerra de Underwood contra el terrorismo de ICO también parece ser un símil de la lucha de Trump con el Estado Islámico.
El episodio debut de este quinto ciclo encamina los peligrosos lineamientos que marcarán la gestión de Frank y Claire en su búsqueda de la reelección, un objetivo complejo si se considera que su contendiente es el astuto Will Conway (Joel Kinnaman).
"House of Cards" habilitará sus 13 nuevos episodios la medianoche del 30 de mayo.
