DENVER.- Taylor Swift se subió hoy al estrado para testificar en el juicio contra de David Mueller (55), a quien acusa de haberle realizado tocaciones impropias durante un encuentro con fans en 2013, antes de un concierto en Denver.
La cantante fue enfática en asegurar que en la oportunidad el ex locutor de radio le metió la mano bajo la falda e intencionalmente le agarró su trasero.
"Él se mantuvo aferrado a mi trasero desnudo mientras yo trataba de alejarme de él", declaró Swift. La cantante dijo no recordar durante cuánto tiempo Mueller mantuvo la mano sobre su trasero, pero afirmó que "fue definitivamente un agarrón, lo suficientemente largo para estar segura de que fue intencional".
Pese a que estaba estupefacta, Swift afirmó que no le dijo nada a Mueller, porque no quería que los fans congregados se enterasen, y tampoco quiso cancelar el evento y decepcionarlos.
Añadió que intentó estar lo más lejos posible de Mueller, y que al despedirse de él y su novia Shannon Melcher, quien también aparece en la foto, les dijo "gracias por venir" con un tono monótono.
Al ser interrogada por el abogado del ex locutor respecto a si Mueller la había tocado en alguna otra parte de su cuerpo, la cantante respondió: "Él estaba demasiado ocupado agarrando mi trasero debajo de mi falda".
Mueller demandó a Swift y otros de su equipo argumentando que la acusación le costó su trabajo y busca una compensación por daños de hasta 3 millones de dólares. Swift respondió con su propia demanda argumentando abuso sexual y pide una compensación simbólica de un dólar.
La cantante también detalló que tanto el ex locutor como su novia parecían intoxicados durante el encuentro y agregó que un guardia de seguridad que trabaja para ella presenció el manoseo.
Según Swift, Greg Dent vio a Mueller levantarle la falda y tocarla, y aclaró que era imposible que otros lo hayan visto, porque estaban posando para la foto con la espalda hacia la pared.
Asimismo, restó culpabilidad al guardia por no haber detenido al ex locutor y en cambio afirmó su crítica va hacia Mueller "por meter la mano bajo mi falda y agarrar mi trasero".
El ex locutor declaró ayer que la foto tomada antes del concierto era "rara e incómoda", pero insistió en que solo tocó las costillas de Swift, no su trasero.
El ex locutor señaló que tocó la falda de Swift al rodearla con el brazo, solo porque sus brazos se habían cruzado: "Mi mano estaba al nivel de las costillas y al parecer descendió", explicó.
"Él no tocó mis costillas, él no tocó mi brazo, él agarró mi trasero desnudo", rebatió Swift.
El caso es procesado en un tribunal federal bajo una ley que permite procesos cuando las partes viven en distintos estados y la disputa implica una queda por daños superiores a los 75.000 dólares.
En el bosquejo realizado hoy, Swift dialoga con su abogado. Crédito: AP