"Lo resistiré, no será difícil", aseguró el realizador.
El Mercurio
VENECIA.- Guillermo del Toro ("El laberinto del fauno") sorprendió durante la presentación de su último filme, "La forma del agua" (2017), en el Festival de Cine de Venecia, ya que anunció que tras más de dos décadas en la industria cinematográfica, hará una pausa de su carrera.
"La novedad es que, por primera vez en 25 años, he decidido tomarme un año sabático, me hacía falta. Y ahorita mismo me interesa mucho no hacer cine", dijo el mexicano.
Tras asegurar que proyectos como la cinta de animación "Pinocchio" van "bien", el realizador señaló que se tomará un breve descanso. "Lo resistiré, no será difícil", aseguró Del Toro, quien presenta hoy "La forma del agua", en la que es su primera participación en la competición por el León de Oro de Venecia.
Y lo hace con una película que sigue la estela de "El laberinto del fauno" (2006) o "Hellboy" (2004) y ahonda en su concepto de que "dentro de lo monstruoso está lo bello y dentro de lo normal está lo monstruoso".
"La idea del monstruo como figura de redención es una idea muy religiosa para mí y muy personal" y cien por cien mexicana, resaltó Del Toro sobre una película que ha recibido el aplauso unánime de la crítica tras su primera proyección en Venecia.
Se trata de un cuento de hadas protagonizado por un monstruo y una joven muda (interpretada por Sally Hawkins) en los Estados Unidos de 1962, un momento de sueños que se truncaron con la muerte de John F. Kennedy, explicó Del Toro.
Es, dijo, una película muy política en la que aparece el racismo, el sexismo, el clasismo, vivos entonces y ahora en opinión del realizador: "No hemos progresado mucho".
"Vivimos en un tiempo en que nos dicen los políticos todo lo que nos hace diferentes, lo que nos separa, lo que no nos une y a mí me interesaba muchísimo enseñar el poder del amor, que no tiene forma", precisó el director.