SANTIAGO.- "Durante estas últimas madrugadas en La Chancholina, mientras nos alimentamos de wachiturros y metaleros, tanto don Kicho como el vampiro Chalo me han estado educando en la cultura vampírica, por decirlo de alguna manera. Podría contarte caleta de cosas, querido y bastardo diario. Por ahora me da paja seguir, así que solo te nombraré las que más me impresionan: Uno. En la capital hay muy pocos vampiros, la mayoría se encuentran en el sur y norte. Este hecho es debido a que las grandes ciudades no son buenos lugares para los vampiros".
Con soltura se expresa Johnny en la novela "Diario flaite de un vampiro" (Catalonia, $9.300), que narra su conversión de humano a criatura oscura en plena ciudad de Santiago. Su creador, Joannes Lillo (Santiago, 1989) dice que el personaje es su alterego por que va a talleres de escritura, usa el metro y las redes sociales, como él.
"Diario flaite de un vampiro" contiene ilustraciones de Valentina Santiagos y es el debut literario de Joannes Lillo, quien creció en la comuna de Pudahuel y ahora reside en Lo Prado. Estudió Castellano tres años en la Academia de Humanismo Cristiano, carrera que luego abandonó para dedicarse a los talleres literarios. "No podía seguir perdiendo tiempo, tenía que escribir", dice.
"Esta es una novela de vampiros, no creo que sea la primera ni la última que se haya hecho en el país", explica Lillo, "traté de que estuviera presente mi identidad y mi ciudad, Santiago. Sin copiar ni adaptarme a las ciudades del primer mundo y caer en la obviedad".
Santiago es, precisamente, uno de los elementos protagónicos de la obra y las criaturas de la noche transitan en paisajes como Avenida San Pablo y la Plaza Víctor Jara en Pudahuel. "No podría escribir que dos vampiros salen de una disco por la puerta trasera y en un callejón lleno de gatos en los basureros se empiezan a besar, porque eso no pasa en Chile", dice Lillo entre risas. "Si puedo decir en cambio, que dos vampiros salieron de una disco y con un amigo se compraron una sopaipilla en la calle, por ejemplo", agrega.
"Diario flaite de un vampiro" arranca cuando el protagonista sufre una suerte de asalto junto a un amigo, mientras caminan de noche borrachos en busca de drogas. En vez de robarles, los mordisquean. Y la novela avanza a la vez que el novato vampiro se acostumbra a su vida nueva: no ver la luz del sol, alimentarse de sangre, huir de los objetos de plata y ser inmortal. Todo esto contado con fluidez por Lillo en dialecto chileno puro y duro.
"Alguna vez me criticaron diciéndome que escribía coloquial, inculto informal para hacerme el choro, el antiacadémico, el escritor de la calle, pero es mucho más simple que eso: es un acto de sinceridad", comenta el autor. "Hay libros del canon chileno que dicen 'Pedro fue al lavabo' u otros siúticos que usan la palabra garaje, no sé si en la Dehesa o Vitacura alguien tendrá un ‘garaje’ pero me resulta artificial decirlo en Santiago".
Convertirse en vampiro también tiene sus cosas buenas para Johnny. El personaje destaca que se ahorra mucha plata por su nueva dieta y además está dotado del poder de la coerción, que le permite jugar con la mente de los demás para manipularnos a actuar de cierta forma. Las cosas se complican cuando se da cuenta de que otros vampiros también la pueden usar contra él.
Especialmente interesante resulta el pasaje en que el protagonista se compara con los vampiros de distintas películas y novelas de la cultura popular; desde "Entrevista con el vampiro" hasta "Crespúsculo". De esta última comenta, "un verdadero fiasco que puro nos dejó mal paraos".
El autor explica la distancia que establece con la famosa saga juvenil. "La mía es menos novela rosa y más existencialista, más cercano a los vampiros de Anne Rice, que se preguntan que son el mal y el bien; que miran a la gente y se preguntan por qué están aquí".
Lillo dice que se inspiró en obras de Poppy Brite, Richelle Mead y Won Soo-yeon. Además, reconoce gran admiración por la cantante chilena Planta Carnívora y comenta que ya trabaja en la segunda parte de "Diario flaite de un vampiro".