Philippe Lefebvre toca el órgano de la catedral de Notre Dame en París. Foto de mayo de 2013.
AP
El
órgano de cinco teclados y 8.000 tubos de
Notre Dame no sufrió daños en el devastador incendio que arrasó parte de la catedral de París la semana pasada.
Pascal Quoirin, un especialista que restauró el instrumento en 2017, revisó el órgano y determinó que no sufrió daños a causa del fuego que destruyó gran parte del techo del templo.
"Tras pasar dos horas examinando la parte instrumental, no noté ningún daño que pudiese haber sido causado por el fuego", explicó Quoirin.
Según el experto, el termómetro ubicado en el interior del órgano mostró que la temperatura no superó los 17 grados Celsius el día del siniestro, lo que aseguró que no se produjeran daños en los componentes electrónicos o los tubos.
Órgano de Notre Dame en febrero de 2004. Crédito: AFP.
El órgano habría sobrevivido porque se encuentra ubicado en la parte delantera de la catedral, debajo de un techo de piedra, a diferencia de gran parte del edificio que estaba bajo el techado de madera de 800 años. Además, el techo que está sobre el instrumento está inclinado, por lo que el agua escurrió por ahí, lo que también habría protegido al instrumento, según informó The New York Times.
El medio agregó que los orígenes del órgano se remontan a 1400, aunque la pieza actual es de 1868 principalmente, se le han agregado partes y se ha mejorado muchas veces.
Quoirin recomendó proteger el instrumento con una urna impermeable, limpiarlo y tocarlo de forma regular durante las labores de restauración.