La
industria del libro en Chile tiene varios
vacíos informativos. Así lo plantean algunos gremios que reúnen a diferentes editoriales del país y que señalan que las pocas estadísticas que hay
no reflejan fielmente el panorama de publicación nacional. Esto repercute en el sector, ya que, como "no se conoce bien", no se "pueden tomar buenas medidas", ni tampoco "se pueden armar bien las políticas". Y, finalmente, todo se traduce en que
no se sabe si Chile es o no un país lector.
"El único registro de libros publicados en nuestro país es el informe
ISBN, que lo lleva la Cámara Chilena del Libro (otro gremio que agrupa empresas editoriales). Es el único documento como más representativo en donde hay información respecto a lo que se publica en nuestro país", explica
María Paz Morales, presidenta de Editoriales de Chile, a Emol.
"Se trata de un informe estadístico que se publica todos los años, donde se inscriben los libros que van saliendo, y al realizarlo, te dan un número que es como el
carnet del libro", agrega. Sin embargo, Morales considera que ese registro "
no refleja fielmente el panorama de publicación nacional, ya que hay muchas editoriales pequeñas que no le ponen ISBN a sus libros (casos de libros de artistas, fanzines y publicaciones experimentales)".
"La proliferaciones de editoriales con otros formatos es muchísima, se puede ver la cantidad de oferta existente en diversas ferias del libro, donde se puede observar que menos del 10% las marcas o editoriales usa ISBN", afirma.
Esto, asegura Morales, es un problema, porque "ahí no está representado todo el sector del libro. Están representados los más formales, los gremios más grandes".
En este sentido, la presidenta de Editoriales de Chile sostiene que, si bien el
"ISBN nos da una cifra, tampoco es tan representativa. Porque ni este, ni ningún otro estudio nos entrega respuesta a:
¿Cuántas editoriales existen en Chile?; ¿Cuántas editoriales están agremiadas?; ¿En qué grupos?; ¿Cuántos
libros publicados son de autores chilenos?; ¿Cuáles son las características de nuestros autores?; ¿Cómo son las editoriales chilenas?; ¿Cómo están conformadas y cómo publican?, entre otros".
Es por esto que -dice Morales- "
nadie sabe las cifras de si en Chile se lee mucho o poco. Se publican muchos libros y se compran libros, pero no sabemos si se leen.
Ni tampoco sabemos si se comprende lo que se lee".
"Nadie sabe las cifras de si en Chile se lee mucho o poco. Se publican muchos libros y se compran libros, pero no sabemos si se leen. Ni tampoco sabemos si se comprende lo que se lee".
María Paz Morales. presidenta de Editoriales de Chile
Y aunque existen estudios sobre hábitos y comprensión de lectura, según María Paz Morales, "son pequeños, porque las muestras son pequeñas y por lo tanto considero que no son representativos".
Soledad Gutiérrez, directora ejecutiva de la Corporación del Libro y la Lectura, coincide con el diagnóstico de Morales. "
El mundo del libro en Chile básicamente se mueve a ciegas. No hay estadística actualizada respecto de la lectura, de cuánta gente está leyendo o qué está leyendo. Incluso en temas, por ejemplo, de decir cuántos libros se están publicando anualmente, no hay estadísticas que te puedan orientar claramente respecto de eso", señala a Emol.
"El mundo del libro en Chile básicamente se mueve a ciegas. No hay estadística actualizada respecto de la lectura, de cuánta gente está leyendo o qué está leyendo. Incluso en temas, por ejemplo, de decir cuántos libros se están publicando anualmente, no hay estadísticas que te puedan orientar claramente respecto de eso".
Soledad Gutiérrez, directora ejecutiva de la Corporación del Libro y la Lectura
Gutiérrez explica que esto ocurre debido a que "hay un
retraso general en la aplicación de encuestas e informes. Hay una encuesta que hace el Consejo Nacional del Libro y la Lectura que
lleva años sin realizarse". Asimismo, indica que "el tema se arrastra de años. Entonces, no creo estar exagerando al decir que todos los gremios del libro y que las mismas instituciones del Estado están esperando que se realicen estos estudios
para poder trabajar con mayores certezas".
El presidente de la Cámara Chilena del Libro, Eduardo Castillo, también comparte la visión de Morales y Gutiérrez. "Por supuesto que falta información.
Lo ideal sería contar con muchas más estadísticas y sistemáticas. Por ejemplo, en el ámbito de las ventas de libros y en el de las importaciones, no tenemos estadísticas y en Chile muchos de los libros que se venden son importados", dice Castillo a
Emol.
Eso sí, destaca que "en alguna medida es una situación, yo diría, bastante cercana o similar a otros países en Latinoamérica en el nivel de tamaño y maduración nuestro. Es un tema, como digo, de
falta, yo supongo
, de recursos, de madurez también del mercado,
de la industria".
Y añade:
"No es tan fácil levantar estadísticas. Y no solamente sucede en la industria del libro".
Ismael Rivera, editor de Oxímoron -parte del gremio La Furia del Libro- también asegura
que en la industria faltan estadísticas. "Sin duda, hasta el momento lo único que existe de estadísticas son los libros que se inscriben a través del ISBN y son datos súper insuficientes para poder generar políticas públicas, por ejemplo, respecto al libro", sostiene a Emol.
"Entonces faltan ciertos datos, por ejemplo, algunas estadísticas sobre comportamientos lectores de parte de las bibliotecas públicas, de parte de las bibliotecas municipales, que sería importante tener. También datos levantados desde las mismas editoriales. Sería interesante ver cuántas editoriales subsisten, quiénes viven de su propia editorial. Por ejemplo, eso daría cuenta un poco de las condiciones sobre las cuales se trabaja en la industria del libro, entendiendo que hay diferentes realidades", agrega.
"La información es esencial para una buena gestión"
Esta situación repercute en la industria del libro, ya que -según afirma María Paz Morales- "
no conocer bien el sector hace que no se puedan tomar bien las medidas, que no se puedan armar bien las políticas. Y eso va repercutiendo, porque
no conocemos la industria ni para quién estamos trabajando".
"No conocer bien el sector hace que no se puedan tomar bien las medidas, que no se puedan armar bien las políticas. Y eso va repercutiendo, porque no conocemos la industria ni para quién estamos trabajando".
María Paz Morales, presidenta de Editoriales de Chile
Además, indica que sin las estadísticas, "no se puede caracterizar el sector,
porque tenemos algunas cifras, pero no de todo tipo de cosas". Para ella la situación es relevante, ya que "cuando se están armando
políticas en conjunto, y se están invitando ciertos actores, no se sabe a dónde llegar porque como que tampoco están alineados"
.
Asimismo, afirma que "si supiéramos y si tuviéramos esa información, las
políticas públicas que se van adaptando o que
se van acogiendo en la política del libro podrían ser mucho más eficientes".
En tanto, Soledad Gutiérrez manifiesta que se necesita tener cifras sobre la industria del libro "para poder tener la base en qué
construir desde el mundo público y desde el privado,
caminos que sean más efectivos para la lectura, para su promoción, para
abrir caminos a nuevos autores, ilustradores, en general y para poder pararse en el mundo. Uno
necesita saber desde dónde está parado y en este mundo del libro no está esa situación. Entonces,
es muy poco orientado el trabajo que se puede hacer en estos momentos".
"Si supiéramos y si tuviéramos esa información, las políticas públicas que se van adaptando o que se van acogiendo en la política del libro podrían ser mucho más eficientes".
María Paz Morales, presidenta de Editoriales de Chile
Además, indica que tener información sobre la industria del libro es importante porque, por ejemplo, "hay estudios que indican que los niños de segundo básico tienen una baja comprensión lectora de lo que están leyendo, pero, por ejemplo, esa misma información se podría trasladar a los jóvenes, para dar una mirada más acabada sobre el estado de la lectura, pero sin esos datos,
es un cliché decir que en Chile o se lee poco o se lee mucho".
Por su parte, Castillo asegura que "tener estadísticas,
siempre es un insumo muy importante para las decisiones que se van tomando y para los planes que se toman en cuenta hacia adelante".
Sin embargo, señala que esta situación "
no ha sido un obstáculo para crecer, para desarrollar y para seguir presente, pero sí
es un obstáculo para tener otro nivel de presencia en el mercado y para ayudar en general a los editores a tener mejores decisiones a la hora de inversiones que se tengan que hacer, de elecciones, de títulos, etcétera".
"La información es esencial para una buena gestión y es esencial para un desarrollo más sostenible en el tiempo y la toma de decisiones mejores en la inversión".
Eduardo Castillo, presidente de la Cámara Chilena del Libro
"La
información es esencial para una buena gestión y es esencial para
un desarrollo más sostenible en el tiempo y la toma de decisiones mejores en la inversión", enfatiza.
Ismael Rivera indica que este panorama repercute ya que "al no conocer la realidad de la industria del libro,
no es posible generar políticas públicas que apunten a robustecer la industria del libro en Chile". "Se está avanzando en el tema"
"El
Estado debería hacer una caracterización para conocer el ecosistema completo de quiénes hacen los libros y de esa manera poder hacer
políticas públicas que impacten de mejor manera en la industria", sostiene María Paz Morales.
En este sentido, la presidenta de Editoriales de Chile asegura que desde el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio ya se está trabajando en hacer un levantamiento generalizado de información.
"
Nos aseguraron que se estaba trabajando en la política, para que se pueda implementar ahora lo antes posible, y además nos comentaron que ser el
país invitado en Frankfurt el 2027,
involucra una serie de acciones que les exige la organización de la feria.
Y dentro de esas acciones, justamente, está el levantamiento de información de la industria general. Entonces igual se está avanzando en el tema", afirma.
En esa línea, Soledad Gutiérrez manifiesta que "
es indispensable tener este mapa antes de Frankfurt. Yo no creo que se pueda concebir hacer un trabajo de buena manera para la participación de Chile como país invitado a Frankfurt,
sin tener esta información".
"En esta instancia hay que tener estudios e informes. Entonces la participación de Chile en el certamen va a ser un incentivo para poder desarrollar y tener de aquí al 2027 los informes, los estudios desarrollados", asegura. Y agrega: "
Las autoridades están súper pendientes y tienen súper claro esto. Creo que se va a desarrollar el trabajo. Sabemos que se está trabajando y que es una de las prioridades. Entonces, estamos súper atentos para ver cómo se van a desarrollar estos estudios".
