Desde hace algunas semanas, la Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales (SCD) viene alzando la voz en relación a
"irregularidades" en la implementación de la denominada "Ley del Telonero", cuyo objetivo es fomentar la participación de músicos chilenos en los espectáculos de artistas extranjeros que congreguen a más de 600 personas.
En este sentido, la normativa aprobada en 2020 establece que ese tipo de shows deben "contemplar la participación de al menos un telonero chileno". Asimismo, establece exención de IVA (19% de cada boleto) para los espectáculos extranjeros que abran con un artista nacional y el
pago de derechos de autor para estos últimos.
"Los derechos de autor son irrenunciables".
SCD
Sin embargo, a comienzos de diciembre la SCD emitió un comunicado en el que se refiere a "informaciones divulgadas recientemente, en las que se indica que
productores de espectáculos estarían solicitando a músicos nacionales que cedan parte de sus derechos autorales por su participación en eventos internacionales".
La entidad hacía referencia al caso específico de una productora que -según denuncias- en al menos 11 conciertos internacionales exigió a los artistas chilenos que pagaran entre el 35% y el 50% de sus ganancias por derechos de autor.
Al respecto, la entidad estableció que "
los derechos de autor son irrenunciables y pertenecen únicamente a los creadores de las obras ejecutadas". Asimismo, agregaron que "no es posible soslayarlo ni vulnerarlo, y quienes se desempeñan en la propia industria de la música deberían ser los primeros en garantizar su respecto".
La SCD calificó el hecho como
"una práctica abusiva" e instó a los artistas "a no dejarse atropellar".
El tema resurgió esta semana, luego de que la
subsecretaria de las Culturas, Jimena Jara, participara en una sesión de la comisión de Cultura, Artes y Comunicaciones de la Cámara de Diputados. En la instancia, la autoridad emitió
declaraciones que no gustaron a la SCD y este viernes el Consejo Directivo de la entidad publicó una
carta en El Mercurio para manifestar su molestia.
"Esta semana, la subsecretaria de las Culturas, Jimena Jara, participó en una sesión de la comisión de Cultura, Artes y Comunicaciones de la Cámara de Diputados, donde se abordaron las prácticas abusivas en que algunas productoras de espectáculos estarían incurriendo al contratar artistas nacionales, en el marco de la llamada 'Ley del Telonero'", comienza la misiva.
"Es desalentador constatar que quien debe promover un correcto funcionamiento del ecosistema que le toca vigilar, más bien busque excusas para mantenerse como espectadora de abusos que se están cometiendo".
Consejo Directivo SCD
Y continúa: "Allí,
la autoridad señaló que el cobro de importantes porcentajes del derecho de autor a los artistas no sería algo ilegal, que estos derechos 'no son irrenunciables', que en su repartición 'no existe una atribución para fiscalizar' ni 'una capacidad para hacerlo tampoco', y que la entrega de beneficios tributarios a las productoras que incluyen teloneros chilenos no está supeditada a más requisito que esa sola inclusión".
"
Esperaríamos más comprensión de las implicancias que esta problemática tiene, por parte de la autoridad que está llamada a trabajar por un correcto desarrollo cultural, proceso en el cual el derecho de autor es un eslabón principal", enfatizan los miembros del Consejo Directivo de la SCD.
Y agregan: "Amén de mostrar
desconocimiento en algunos aspectos del tema (como el carácter irrenunciable que efectivamente tiene este derecho), es desalentador constatar que quien debe promover un correcto funcionamiento del ecosistema que le toca vigilar, más bien busque excusas para mantenerse como espectadora de abusos que se están cometiendo".
Los representantes de la entidad finalizan la carta señalando que "prácticas como esta que hemos conocido en las últimas semanas, no hacen más que afectar el correcto desarrollo de una industria que necesita de medidas efectivas de protección y resguardo, las que son responsabilidad del Estado promover e impulsar.
Se requiere de convicción y firmeza para acabar con este tipo de prácticas de modo que la cultura en Chile sea una política pública seria, más que una declaración de buenas intenciones".
La misiva está firmada por Rodrigo Osorio, René Calderón, Gloria Simonetti, Denisse Malebrán, Alejandro Guarello, Elizabeth Morris, Héctor Molina, Magdalena Matthey, Hugo Manzi y Rául Aliaga.
